En su opinión, esta situación no sólo representa una expropiación de las marcas a sus titulares sino que además tendrá consecuencias muy negativas para todo el sector que en España representa 56.000 empleos y casi 10.000 millones de recaudación fiscal.
Por su parte, el presidente de la Unión de Asociaciones de Estanqueros de España, Mario Espejo, ha señalado que el empaquetado genérico facilitará el aumento del comercio ilícito de tabaco, en manos de las redes criminales organizadas.
Ha recordado que el comercio ilícito, que hasta hace un par de años era prácticamente inexistente, supuso más del 6 % de las ventas totales en 2011 y las últimas estimaciones calculan que podría haber subido ya hasta el 10-12%, superando incluso el 20% en regiones como Galicia o Andalucía.
El portavoz de la Mesa del Tabaco ha recordado que, en EEUU, la Corte de Apelaciones de Washington dictó una sentencia en agosto en la que considera que la obligación de incluir advertencias sanitarias de gran tamaño viola los derechos corporativos de las empresas y ataca injustificadamente a las marcas.
Ha apuntado que en esa sentencia, el Tribunal Supremo señala que no hay ni una sola prueba que demuestre que la inclusión de advertencias sanitarias de gran tamaño redunde en un menor consumo.
Según la Mesa, hace unas semanas el Organismo de Alimentación y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés), que en un primer momento había pedido al Tribunal Supremo que se revisara el fallo, dio marcha atrás y decidió no recurrirlo.