El banco alemán señala, citando datos de la CE, que la exportación de trigo ha alcanzado esta temporada 12,75 millones de toneladas, solo 1 millón menos que el mismo período de la campaña anterior.
En los mercados internacionales, el trigo "mejoró" en los últimos días por "circunstancias especulativas" en torno a los fondos de inversión, unidas a rumores sobre una posible limitación de las exportaciones por parte de Rusia, que parecen haberse disipado, según fuentes de las comunidades autónomas.
En España, la Lonja de Cereales de Barcelona ha registrado repuntes en el caso del maíz originario de la Unión Europea (UE), que este martes ha cotizado a 168 euros/tonelada, un euro/tonelada más caro que la semana pasada; por el contrario, el importado de otros orígenes no ha variado y se vende a 163 euros/tonelada.
En el caso del trigo, el panificable ha aumentado también un euro semanal, hasta 209 euros/tonelada; por el contrario, el forrajero ha caído un euro, hasta 200 euros/tonelada.
A largo plazo, la CE estima que se mantendrán los buenos augurios para las exportaciones de cereales comunitarias, tal y como ha publicado en su último informe de perspectivas agrícolas para 2014-2024.
En el caso de cereales y oleaginosas, Bruselas prevé en los próximos años "una demanda mundial sólida", que propiciará un aumento de los envíos de grano de la UE. Entre las razones de dicha demanda, menciona el uso para piensos o para biocarburantes, si bien la expansión de esta clase de combustibles en los próximos años "será menos dinámica de lo esperado".
En origen los precios están por encima de la media histórica
En cuanto a los precios, los cereales se pagarán en origen "por encima de la media histórica a medio plazo", pero siempre por debajo de los niveles registrados en 2012, un año en el que fueron excepcionalmente altos. De momento, en la Bolsa de Chicago y en París, las cotizaciones del trigo cayeron este martes un 2 % y un 1,3%, respectivamente, según Commerzbank.
Otros datos que mejoran las perspectivas de producción de la UE son los difundidos por el Ministerio de Agricultura de Francia (primer proveedor de España), que apuntan a un incremento del 2 % de la superficie nacional dedicada al cultivo de trigo para la campaña 2015.
Por otra parte, según el banco alemán, la demanda de este producto está aumentando en Rusia a causa de su veto a las exportaciones agroalimentarias de la UE, así como por el impacto del frío y la sequía en las plantas que acaban de brotar para el año que viene.