El sector agrario español se mantiene expectante ante las primeras decisiones que el nuevo presidente de los EEUU, Donald Trump, pueda adoptar en asuntos como el acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), el acuerdo de París o si impulsa o no medidas proteccionistas que restrinjan la exportación.
No en vano, algunas organizaciones del sector recuerdan que EEUU es uno de los principales mercados de exportación para productos españoles como el vino, las aceitunas de mesa o el aceite de oliva.
El presidente de Cooperativas Agro-alimentarias, Ángel Villafranca, recuerda a Efeagro que «es prematuro hacer una valoración sobre las políticas que va a llevar a cabo Trump» y habrá que esperar hasta «ver qué decisiones toma en los aspectos que afectan a la agricultura y ganadería europea.»
Cooperativas teme «cualquier cambio hacía un mayor proteccionismo aumentando las barreras arancelarias o no arancelarias»
A corto plazo, detalla que «si el dólar se mantiene bajo afectará a las exportaciones de los productos como aceite de oliva, vino o frutas y hortalizas, y beneficiará las importaciones porque se mantendrán bajos los precios del petróleo o el maíz».
Sobre los acuerdos comerciales, «habrá que esperar la posición que toma finalmente», según Villafranca, quien ha recordado que el mercado de EEUU es el principal destino de las exportaciones de la UE y «cualquier cambio hacía un mayor proteccionismo aumentando las barreras arancelarias o no arancelarias puede provocar una mayor dificultad de entrada de nuestros productos».
En política medioambiental, añade que «hay que esperar a ver qué pasa con el acuerdo COP21 de París, porque éste es crucial para el sector agroalimentario ya que de él saldrán las políticas de reducción de emisiones, economía circular…».
Asaja lo tiene claro y espera que no cumpla muchas de sus promerss electorales
Por su parte, el presidente de Asaja y de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español, Pedro Barato, confía en que Trump no cumpla muchas de las promesas que ha realizado durante la campaña electoral porque ahora «viene la realidad», porque tendrá que gobernar.
Entre las preocupaciones, Barato apunta a lo que ocurra con el tratado comercial que negocian EEUU y la UE (TTIP) -si se culmina o se retira-, con la cumbre del clima o lo que tiene que ver con las exportaciones españolas, especialmente de sectores tan emblemáticos como el vino, el aceite de oliva o las aceitunas, por ejemplo.
El presidente de Asaja añade que las incertidumbres, después de la sorpresa de la victoria de Trump, «nos animan a seguir trabajando como hasta ahora para situar los productos alimentarios y agrarios españolas en un mercado tan importante para nosotros como los EEUU».
UPA cree que se «abre un abismo de incertidumbres y dudas» aunque celebra el posible final del ttip
Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) consideran que el hecho de que Trump sea el nuevo presidente de Estados Unidos «abre un abismo de incertidumbres y dudas cuyos efectos aún se desconocen».
A pesar de los anuncios de Trump en relación con la política comercial que adoptará, UPA cree que aún está todo por ver, ya que entre las posiciones que ha adoptado el presidente conservador durante la campaña y las políticas que luego aplique puede haber una gran distancia.
No obstante, la organización agraria asegura que «el TTIP queda herido de muerte, entre el rechazo que ha suscitado en la sociedad europea y la oposición mostrada por el nuevo presidente Trump», quien además ha asegurado que incrementará los aranceles a la importación.
COAG cree que «no pinta bien para el comercio con la UE y, por supuesto, con nuestro país»
Mientras tanto, el secretario general de COAG, Miguel Blanco, afirma que no quedan claras las líneas de política económica que seguirá Trump porque «apenas las ha esbozado, más allá de planteamientos populistas, demagógicos y de corte nacionalista».
En todo caso, Blanco afirma que lo que el ya presidente de EEUU ha declarado hasta el momento «no pinta bien para el comercio con la UE y, por supuesto, con nuestro país, porque está realizando planteamientos ultra-proteccionistas».
El secretario general critica que Trump plantee aplicar «la ley del embudo», es decir, proteger el mercado norteamericano al tiempo que «ocupar» los mercados exteriores ni «tampoco puede ser que haga un rechazo total y absoluto de la Organización Mundial de Comercio (OMC) sólo por una cuestión: porque no acepta las reglas salvo que las ponga él mismo».