La consejera andaluza de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha mostrado su desacuerdo con la nueva estrategia de la Unión Europa denominada ‘De la granja a la mesa’ al entender que condena al sector primario andaluz y se ofrece a liderar un frente para corregir todo aquello que dañe al sector productivo.
En este sentido, Crespo ha asegurado que aunque Andalucía comparte los criterios de sostenibilidad, estará en contra de la fórmula bajo la que se plantea desde Bruselas, gravemente perjudicial para el sector agroalimentario andaluz, potencia mundial en exportaciones.
Los agricultores andaluces ofrecen productos saludables y a un buen nivel adquisitivo, fundamentalmente a los consumidores europeos, mercado natural de las ventas al exterior. “Desde Andalucía queremos una agricultura más sostenible desde el punto de vista medioambiental y social, pero no que sea a costa exclusiva de nuestros agricultores. Hay que hacerlo fijando unas fechas determinadas y de forma paulatina, porque de lo contrario, lo que hace Europa es condenar al sector agrario y ganadero de todo el continente. Está estableciendo una competencia desleal con otros países que pueden exportar a nuestro continente y está desdeñando las circunstancias que tienen nuestros productores”, ha señalado Crespo.
Se ofrece a liderar una postura de diálogo y consenso que evite un perjuicio claro para los agricultores
“Creemos que en este momento desde Bruselas ponen cargas al sector en lugar de dar oportunidades -ha continuado-, algo sorprendente, precisamente tras haber sido la agricultura, durante la pandemia, fuente fundamental de abastecimiento a todos los mercados europeos y colchón de la crisis desde el punto de vista del empleo. No entendemos a Europa, una Europa que no protege a sus agricultores y ganaderos europeos”.
La titular del ramo ha mostrado su predisposición a liderar un frente para corregir todo aquello que dañe al sector productivo. “Ahora mismo la UE está condenando con estas propuestas a los agricultores competitivos y a los que quieren exportar”, ha añadido.
La consejera estima que la propuesta carece de “alternativas” porque “todos queremos productos más sostenibles y de calidad, algo que no está reñido con una agricultura y una ganadería competitivas como las que se desarrollan en Andalucía”. En este sentido, Crespo ha añadido que “sin una mayor flexibilidad en la propuesta estaríamos condenando al sector”.
Por todo ello, Crespo ha insistido en que Andalucía se ofrece a liderar una postura de diálogo y consenso que evite un perjuicio claro para los agricultores. “Europa tiene que ser más sensible a las circunstancias de nuestro sector y en estos momentos protegerlo aún más, acabando con las prácticas desleales de terceros países. En eso debe estar Europa y no en poner más carga a nuestra agricultura”, ha finalizado.