La Interprofesional Láctea (InLac) promoverá la redefinición del logo Productos Lácteos Sostenibles (PLS) para implantar un sello al que puedan adherirse libremente las marcas y que garantice la sostenibilidad y el origen de la leche que adquieren los consumidores en las cadenas de distribución.
El también director general de Capsa ha avanzado estos objetivos tras mantener su primera reunión con la consejera de Desarrollo Rural del Principado de Asturias, María Jesús Álvarez, desde que fue designado para ponerse al frente de la InLac.
Inlac espera que antes de final de año el Ministerio apruebe la identificación del origen de la leche en los envases
Tellado ha señalado que las prioridades de sus dos años de mandato pasan por poner el sector lácteo en la agenda política española y desarrollar el Acuerdo para la Estabilidad y Sostenibilidad de la Cadena de Valor del Vacuno de Leche firmado en 2015 por 62 organizaciones y empresas del sector (producción, industria y distribución).
«El consumidor debe poder identificar al productor que se compromete con Asturias y con España», señaló el nuevo presidente de Inlac, José Armando Tellado, que se ha mostrado confiado además en que el Ministerio de Agricultura apruebe antes de que acabe el año el decreto que regule la identificación del origen de la leche en los envases como ya se hace en Francia o Italia.
A su juicio, es necesario avanzar en la definición del concepto de sostenibilidad de modo que se establezcan relaciones equilibradas y transparentes entre productores, industrias y distribuidores así como en la búsqueda de mejores prácticas en las modalidades de contratación entre estos dos últimos sectores.
Tellado, que ha coincidido en esta reivindicación con la consejera, ha incidido en la necesidad de evitar que en esas relaciones contractuales se limiten los desequilibrios en el poder de negociación a lo largo de toda la cadena de valor de la leche.
Asimismo, ha defendido promover el consumo de leche en España tras el descenso continuado en los últimos años -un 27 por ciento de baja per cápita entre 2000 y 2015 hasta situarse en 73 litros- dado que esa reducción, unida a un incremento en la producción derivado del fin del sistema de cuotas, genera «problemas» en el mercado.
«No hay ningún producto que tenga la calidad proteica de la leche ni su aportación de calcio ni con un valor nutricional tan alto por céntimo de euro de coste de consumo», ha defendido Tellego.
A su juicio, la bajada continua en el consumo de leche se debe tanto a la caída de la natalidad, como a la difusión de «informaciones seudocientíficas y fraudulentas» que desplazan al consumidor a otras alternativas de menor valor nutricional.