La industria láctea española pide revisar la actual Ley de la Cadena Alimentaria porque les genera «indefensión» respecto a los criterios para medir los costes efectivos de producción, «falta de seguridad jurídica» y una reducción de los contratos a largo plazo, entre otros aspectos.
Así lo ha asegurado el presidente de la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil), Ernesto Castro, durante la celebración de unas jornadas sectoriales en el Congreso de los Diputados.
Aunque comparte los objetivos de esta ley, ha defendido su revisión porque el texto vigente «no está exento de problemas» y para que la actividad se desarrolle «en un marco legal equilibrado».
También ha pedido un trato «particular» para la industria láctea dentro de la futura ley de industria y autonomía estratégica, con una asignación «importante» de fondos «específicos».
Entre otras peticiones, ve necesario que la futura Estrategia Nacional de Alimentación «cuente con la aportación» de este sector, que reclama un «apoyo decidido a la internacionalización» dentro de la misma, y ha exigido una reducción del IVA, del 10 al 4%, del yogur y de las leches fermentadas.
El director general de Fenil, Luis Calabozo, ha asegurado, en declaraciones a Efeagro, que el «papel del legislador es muy importante» para conocer «de primera mano» la realidad del sector en un «momento de cambio, ofensivo, de política industrial y agroalimentaria».
Además, en su intervención ha hecho una radiografía del lácteo, recordando que España es el séptimo país productor de leche de vaca de la Unión Europea, el segundo en cuanto a leche de oveja y el tercero para la de cabra, con una industria que elabora ocho millones de toneladas de productos al año, incidiendo en la necesidad de medir los costes para ganarntizar la rentabilidad de la industria.
También ha hecho hincapié en el proceso de reconversión que ha sufrido el sector en los últimos años y que ha llevado a producir más con menos.
LOS RETOS, A DEBATE
En la primera mesa redonda se han abordado los retos de la industria láctea en España desde una visión integral, a cargo de la alcaldesa de Navia (Asturias), la presidenta de la Fundación Española de la Nutrición, Rosaura Leis, y el director del Instituto de Ciencia y Tecnología Animal de la Universitat Politécnica de Valencia, Salvador Calvet.
En esta mesa redonda, moderada por la directora de Economía de la Agencia Efe, Laura Cristóbal, se han expuesto ideas como la conveniencia de poner a la ganadería en valor porque es una actividad empresarial «de extraordinaria importancia» así como la necesidad de que sea rentable sin la necesidad de depender de subvenciones.
Por otro lado, se ha incidido en la aportación beneficiosa de los animales productores de leche (rumiantes) para la sostenibilidad porque son «grandes biofactorías» de transformar productos que no tienen valor en alimentos para el consumo humano.
Durante el debate se ha hecho mención asimismo a los «falsos mitos» sobre los lácteos y han pedido a los legisladores que fomenten la simplificación administrativa para favorecer a los agentes que desarrollan bien su actividad.
EL FOCO, EN LA LEGISLACIÓN
En la segunda mesa redonda han intervenido los diputados Javier Folch (PP), Patricia Otero (PSOE), Alberto Rodríguez (VOX) y Alberto Ibáñez (Sumar) que han abordando la futura ley de industria y autonomía estratégica, que comienza su trámite parlamentario.
El PSOE está seguro que el sector agroalimentairo tendrá una importancia «fundamental» en esta ley; PP y VOX creen que el texto de la futura ley carece de consenso y no concreta «nada» para el sector agroalimentario mientras que desde Sumar opinan, por lo contrario, que sí ha habido diálogo, lo que no quiere decir que se hayan recogido, por ahora, las demandas de todos los sectores.
En cuanto a la Ley de la Cadena, para el PP no está siendo efectiva y ha reclamado consenso para proteger a «todos» los eslabones, especialmente los «más débiles»; PSOE no es partidario de modificarla aunque haya «pequeños desequilibrios» que ajustar; VOX cree que la norma es «puro papel mojado»; mientras que en Sumar estima que aún ha pasado poco tiempo para saber si es efectiva, independientemente de que no recoja todos los posicionamientos de su formación.
La clausura ha corrido a cargo del comisionado especial para el Perte Agroalimentario, Jordi Carbonell, quien ha destacado la participación de empresas lácteas en los dos pertes.
En su intervención, ha incidido en el peso económico y social que tiene el sector alimentario y el lácteo, en particular, así como su ayuda para luchar contra la despoblación.