En momentos de calor muy intensos como los que estamos viviendo estos días, es importante mantener una correcta alimentación e hidratación para conservar los mecanismos de termorregulación en buen estado. Esto es más importante si se trata de personas con mayor riesgo de sufrir golpes de calor, mayores, niños y enfermos.
Además de las recomendaciones de los expertos y las autoridades sanitarias –consumo de alimentos poco calóricos y con alto contenido de agua-, Lola Market, el marketplace de alimentación y productos frescos líder en Madrid, propone los siguientes alimentos que ayudarán a combatir el calor en momentos álgidos de temperatura.
ALIMENTOS PICANTES
Cuando comemos alimentos fríos la temperatura corporal desciende, pero el cuerpo tiende a aumentarlo para regularla.
Por ello, la secreción de sudor que provoca comer este tipo de alimentos ayuda a que la piel se refrigere.
SANDÍA Y MELÓN
Si en un día normal la ingesta de agua es muy importante, en momentos de calor intenso aumenta notablemente. Ambos alimentos son muy refrescantes por su alto contenido en agua por lo que ayudan a combatir el calor.
Además, también aportan fibra y minerales, lo que ayuda a nuestro organismo a recuperarse de las pérdidas de magnesio y potasio que se producen con el sudor.
CALABACÍN
Es otro de los alimentos con alto contenido en agua, compuesto por ella en un 95%, y con muy poco aporte calórico. Es una gran fuente de vitamina A, que ayuda a mantener saludables la piel, la vista y el sistema inmunológico, y de vitamina C, necesaria para la producción de colágeno.
MORAS Y FRAMBUESAS
Son ricas en antocianinas lo que permite disminuir la presión arterial y facilitan la vasodilatación, con lo que ayudan al cuerpo a bajar su temperatura a través de la circulación.
MELOCOTONES
Esta fruta refrescante y propia del verano está compuesta por un 87% de agua, por lo que ayuda a que el cuerpo esté hidratado. Contiene, además, hierro, potasio y vitamina C que contribuyen a mantener el sistema inmunitario en buen estado.
Lola Market recomienda, además, aumentar el consumo de frutas y verduras que contienen una mayor cantidad de agua, vitaminas y minerales y son muy poco calóricas para, así, poder evitar la sensación de pesadez y cansancio propios de las altas temperaturas.