EFE.- Según ha informado hoy el delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socias, esta campaña se comenzó el pasado 2 de mayo como respuesta a las numerosas denuncias de payeses, tanto en Baleares como en el resto de España, acerca de robos en sus fincas, especialmente de comida, pero también de materiales agrarios, de tubos de cobre y de maquinaria.

Este aumento en los robos se comenzó a detectar en los últimos dos o tres meses de 2010 y las explotaciones más vulnerables a ellos son las agrícolas, según ha indicado Socias, ya que son grandes extensiones de terreno sin seguridad y en las cuales no suele haber testigos de los hechos delictivos, así como cercanas a vías de comunicación que facilitan la huida.

Si bien el valor de lo que se roba habitualmente no es muy elevado, en ocasiones los delincuentes sustraen de casetas objetos con contenido sentimental para sus propietarios, y se ha llegado a registrar en Mallorca el robo de un tractor y de cinco toneladas de alcachofas, destinadas estas últimas a su reventa en mercados.

También se ha detectado la desaparición de materiales para el cultivo, como herramientas o sistemas de riego, que luego se revenden en tiendas de segunda mano, así como cableado de cobre que se destina a establecimientos de chatarra.

En otros casos los robos han sido de cantidades pequeñas de comida, como por ejemplo unos kilos de tomates o patatas, una gallina o un cerdo, en lo que suponen, según el delegado del Gobierno, "casos dramáticos de intentar sobrevivir en tiempos de crisis".

Para luchar contra este creciente fenómeno se ha puesto en marcha un plan por el cual la Guardia Civil ha creado unas unidades especiales dedicadas exclusivamente a estos robos, y se han habilitado unidades de reserva en caso de que sea necesarios refuerzos.

En concreto, se ha creado una unidad con seis agentes en Manacor y otra en Inca, que se dedican a vigilar las fincas y controlar vehículos o personas sospechosas de haber protagonizado uno de estos robos.

También realizan inspecciones en tiendas de segunda mano de material agrícola y en mercados donde se podría vender la comida sustraída.

Los agentes especializados cuentan además con la colaboración de guardias civiles de tráfico para controlar las vías de fuga y del Seprona para moverse por los caminos rurales.

Hasta ahora, en el marco de este plan, que tiene una vigencia indefinida, se han hecho 49 servicios en Calvià, 21 en Inca y 35 en Manacor, en los cuales se han registrado 10 delitos en toda la isla de Mallorca.

En Menorca se han realizado 13 servicios, sin ningún delito detectado, y en Ibiza 57 servicios. En ninguna de las islas se han producido detenciones, ha señalado el delegado del Gobierno.

Socias ha destacado que es muy importante que los afectados denuncien los robos, por pequeños que sean, para facilitar la actuación de los agentes.

 

×