EFE.- El operativo contará con un total de 151 efectivos, 95 de Medio Ambiente de la institución insular y 56 del Parque Nacional de Garajonay.
La campaña cuenta con más de un millón de euros de fondos propios para cubrir las cuadrillas de Medio Ambiente, dos ingenieros de montes y nueve brigadas de retén de incendios, compuestas por siete integrantes cada una.
También incluye tres emisoristas, un conductor de vehículos disuasorios, tres disuasorios, cinco conductores de vehículos especiales y un técnico coordinación de Cecopin.
La campaña incide en que las viviendas, edificaciones e instalaciones de carácter industrial en zona forestal deberán estar dotadas de una franja de seguridad de 15 metros de anchura mínima, libre de residuos, de matorral espontáneo y de vegetación seca, y se deben colocar matachispas en las chimeneas.
Igualmente, por razones climatológicas y de altos índices de riesgo de incendios, podrá quedar restringido el acceso y tránsito por el monte y demás terrenos forestales.
Quedará prohibido el estacionamiento de vehículos en las proximidades de cualquier depósito o tomas de agua en el monte que impidan el acceso o maniobra de los vehículos.
Las carboneras solamente podrán instalarse fuera del monte o en los claros, siempre en el centro de círculos de 15 metros de diámetro mínimo, sin vegetación y con el suelo mineral al descubierto.
Quedará prohibido acampar sin permiso, no se podrá encender fuego salvo en las zonas señaladas, quedará prohibido el vertido o abandono de objetos y residuos fuera de los lugares autorizados y, en época de peligro medio y alto, el lanzamiento de globos o artefactos de cualquier clase que contenga fuego.