EFE.- Así lo ha manifestado el director científico de la fundación brasileña Fundecitrus, Juliano Ayres, durante el XII Congreso Internacional de Cítricos que reúne hasta el viernes en Valencia a más de dos mil expertos, técnicos y científicos del sector citrícola de 56 países.
En declaraciones a los medios Ayres ha recordado que Estados Unidos y Brasil, dos de los principales países productores de cítricos del mundo, sufren la enfermedad del "huanglongbing" -de la rama amarilla-, una bacteria que se transmite por los insectos y que se está extendiendo con rapidez.
A corto plazo, esta plaga se combate protegiendo con invernaderos los plantones sanos y controlando los insectos transmisores y la planta sintomática pero "en el futuro, el único camino que hay será la biología genética y la transgenia pero esto puede tardar diez años", ha apuntado Ayres.
"A España todavía no ha llegado la enfermedad pero el vector está en la isla de Madeira y amenaza por entrar por África; Hay riesgo y por eso hay que estar atento para tener el conocimiento y buscar una planta más resistente, que va a ser el futuro", ha agregado.
El responsable científico de Fundecitrus ha explicado que su fundación mantiene una estrecha colaboración con el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), "el mayor referente mundial en investigación" y ha incidido en que la lucha contra las enfermedades es "uno de los desafíos importantes" del sector.