"Esto supone que el otro 50 % está en situación de disponibilidad, por lo que si descontamos el 25 % del agua que va a caudales ecológicos, queda un 25 % aprovechable y susceptible de ser utilizada como un trasvase del Ebro", ha asegurado en un comunicado.
No obstante, ante cualquier derivación de aguas hacia la Comunitat y el resto del sudeste peninsular siempre se solicitaría por parte de la Generalitat el agua sobrante de la propia cuenca del Ebro y desde el máximo respeto al medio ambiente, ha precisado.
El voto favorable de la Generalitat en el Consejo Nacional del Agua se debe en parte a que la Confederación Hidrográfica del Ebro, a solicitud de la Generalitat y la Diputación de Castellón, va a hacer una reserva para la comarca de Els Ports de 10 hm3 al año.
Esta zona del norte de la provincia de Castellón se encuentra dentro de la Demarcación Hidrográfica del Ebro y en la actualidad su abastecimiento presenta dificultades al tener que realizarse los suministros mediante bombeos a una gran profundidad.
Por ello, el plan tiene entre sus medidas básicas resolver los problemas de abastecimiento, por lo que se recogen en su capítulo de inversiones obras en la zona por 22,5 millones de euros.
Respaldo de los regantes por que no se desorbita" el cauce ecológico
El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), Andrés del Campo, ha valorado los términos en los que se ha aprobado el plan hidrológico del Ebro porque descartan la reserva de los caudales ecológicos "desorbitados" que pedía Cataluña.
Así lo ha asegurado el presidente de Fenacore en declaraciones a Efeagro, tras celebrase ayer el Consejo Nacional del Agua (CNA), encuentro en el que también se aprobaron los planes hidrológicos de Baleares, Ceuta y Melilla.
El plan hidrológico del Ebro salió adelante con el 85% de los votos a favor mientras que Cataluña se opuso porque el documento no recoge los caudales ecológicos que demandaba la región en Tortosa (desembocadura del río).
Si se hubiesen aprobado los caudales que proponían los catalanes, "habría que dejar de regar sobre el 40% de las hectáreas de riego actuales", ha remarcado.
El presidente de Fenacore ha detallado que Cataluña pedía en caudales ecológicos "más de 7.000 hectómetros cúbicos -más del doble de lo que pasó por todo el río el año pasado", algo que "parece incoherente".
Para Del Campo, el "problema" es "la politización del agua" porque los caudales "no son caudales políticos" y tienen que atender a "criterios técnicos". El plan hidrológico del Ebro permitirá en el futuro utilizar la mitad de sus recursos hídricos frente al 34 % actual, según ha informado.
Finalmente, espera que el nuevo plan sirva para que la cuenca corrija el "problema de la falta de regulación" para lo que ha demandado más embalses en la cabecera.