Los trabajadores de Panrico suman más de 80 jornadas de huelga, desde el 13 de octubre, para rechazar el plan de ajuste que dirección pactó con los sindicatos del resto de plantas españolas y que contempla el despido de 154 trabajadores en Cataluña.

    Tras casi tres meses sin nómina, los trabajadores de la fábrica barcelonesa han habilitado una "caja de resistencia" para cubrir las necesidades básicas de las familias de los huelguistas.

    Salmerón ha precisado que las aportaciones de particulares y otras empresas sufragan la cesta de la compra de hasta 15 familias en la actualidad.

Pendientes de una reunión entre la empresa y los trabajadores


    Para solventar el conflicto, el sindicalista ha confiado en la intervención del gobierno catalán, que aún no ha fijado una fecha para reunir a las partes después de la suspensión del último encuentro programado.

    El 17 de diciembre, la dirección de la empresa anuló la reunión prevista con los trabajadores después de que un piquete "descontrolado" dañara la carga de un camión de distribución de la empresa.

    Unos camiones que, ha reprochado Salmerón, reparten productos fabricados en otras plantas de Panrico, algo que "vulnera el derecho de huelga".

    La planta de Santa Perpètua de Mogoda quedó como la más afectada por los despidos contemplados en el acuerdo alcanzado entre la dirección del fabricante de Donuts y la mayoría de los representantes sindicales de las plantas de Panrico en toda España, dado que de los 745 trabajadores afectados, 154 eran de Santa Perpètua.

    Este acuerdo fue luego rechazado en asamblea por la plantilla barcelonesa, por lo que la negociación vuelve a estar ahora encallada.

×