La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha demandado la puesta en marcha de un plan nacional de infraestructuras en materia hídrica para hacer frente a las sequías e inundaciones derivadas del cambio climático.
En un comunicado, desde esta organización apuntan que hacen dicha petición tras conocer la «visión imprecisa de la realidad hídrica del estudio» aprobado por una subcomisión del Congreso sobre las «propuestas políticas de agua en coherencia con el cambio climático», para la que no se contó con la opinión de los regantes.
«El premio de los regantes por modernizar los regadíos para reducir el consumo de agua ha supuesto disparar la factura eléctrica»
El informe defiende la «reducción de recursos para regadío» para así frenar el consumo de agua; considera a España como un país «maduro» en materia hídrica y aboga por» detener la construcción de nuevos embalses y trasvases» que, para Fenacore, sin embargo, «son esenciales para mitigar los efectos del cambio climático».
A su juicio, hay que «apoyar la estrategia de aprovechamiento de agua» sobre un nuevo Plan Hidrológico Nacional que nazca de un pacto de Estado y que haga posible acometer las actuaciones de los diferentes planes de cuenca vigentes, así como la regulación y modernización de regadíos.
Desde Fenacore también han abogado por un Sistema Integrado del Agua tanto para los recursos superficiales (embalses) como subterráneos (acuíferos) que esté alineado con las diferentes demandas de agua y con el prorrateo de los costes de este recurso.
Han apoyado, asimismo, establecer criterios personalizados para determinar qué precio deben pagar los usuarios por el agua y qué debe cargarse a los Presupuestos Generales del Estado, a la vez que han afirmado que «si se modifica e incrementa la tributación del agua, este sector se vería todavía más perjudicado».
«La competitividad de la agricultura española está en desventaja por unos costes de producción desorbitados» pese a que el productor vende «a precios de hace 20 años», han afirmado. «El premio de los regantes por modernizar los regadíos para reducir el consumo de agua ha supuesto disparar la factura eléctrica», han sentenciado desde Fenacore.