El número total de cerdos ibéricos que entren en la montanera esta campaña en las dehesas españolas caerá un mínimo del 20% en comparación con la anterior, en la que se sacrificaron algo más de 720.000 cerdos.
Así lo ha asegurado a Efeagro la secretaria técnica de la Asociación Española de Criadores de Cerdo Ibérico (Aeceriber), Elena Diéguez, semanas antes de que finalice esta campaña.
Las entidades de inspección que acuden a las fincas proponen cerrar la campaña el 15 de febrero, un mes antes de lo que permite la norma de calidad.
La montanera comenzó tardía y en las zonas donde la producción de bellota era inferior se ha podido complementar la alimentación del cerdo con pasto gracias a las lluvias, ha señalado Diéguez, quien ha añadido que la menor entrada de cerdos ha permitido que el ritmo de sacrificios esté fluyendo bien.
En este sentido, ve excesivo el ajuste que proponen las empresas inspectoras de recortar un mes la campaña por esa menor producción, y defiende llevar el final de la montanera a finales de febrero.
«En nuestra opinión, el recorte puede ser excesivo porque hay zonas que permiten el engorde en fechas más tardías, por lo que hacer un corte general el 15 de febrero puede ser perjudicial e innecesario», ha insistido.