De esta manera, la producción estimada de la presente campaña rondaría las 50.000 toneladas de aceite de oliva virgen extra, convirtiéndose un año más "en la mayor fuente de generación de empleo y riqueza de esta comarca oleícola".
Asimismo, el sector oleícola de la Denominación de Origen sigue apostando de forma "clara e inequívoca" por mantener e incrementar los estándares de calidad que tradicionalmente tienen los aceites amparados por este sello de calidad.
Esta apuesta se desarrolla en todas las fases del proceso de producción del aceite de oliva virgen comenzando por un adelanto generalizado de la recolección de la aceituna en busca de recoger el fruto en las mejores condiciones sanitarias y de maduración, y terminando con la mejora tecnológica continua de las almazaras.