A su juicio, "una visión integrada y amplia de la gestión de la seguridad resulta esencial para conseguir tres objetivos fundamentales: mejorar la conservación de nuestras infraestructuras, incrementar la preparación necesaria para mitigar los posibles desastres, y aumentar la capacidad y velocidad de recuperación de la sociedad cuando se producen".
La responsable del Agua en el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) ha explicado que la difícil situación presupuestaria actual abre un escenario de oportunidades para buscar fórmulas alternativas de financiación para afrontar esas responsabilidades.
Y ha apostado por la innovación y el desarrollo tecnológico permanente como "condición indispensable para dar una respuesta eficaz y eficiente a los retos que plantea la sociedad, que día a día nos reclama más y mejores garantías de seguridad en nuestras infraestructuras hidráulicas".
España es el cuarto país del mundo y el primero en Europa en cuanto al número de embalses. A día de hoy, en nuestro país tenemos más de 1.300 grandes presas en servicio.