Las comarcas más afectadas de Lleida son Les Garrigues (7.445 toneladas menos) y el Segrià (5.362 toneladas menos). En porcentaje, las comarcas más afectadas por la disminución en la producción de oliva son la Noguera, con un 67%; la Terra Alta con un 48%, el Segrià con un 45% y Les Garrigues con un 44%.
Unió de Pagesos advierte de que estas cifras empeoran todavía más la situación de las explotaciones de olivo catalanas, que son las que perciben menos ayudas directas de todo el Estado, según informes de la Comisión Europea, mientras los productores catalanes son los que soportan un mayor coste de mano de obra con menor productividad del trabajo.
Por otra parte, el margen neto medio de las explotaciones especializadas en la producción de olivas ha pasado de ser positivo en el año 2008 a ser de -282 euros la hectárea en 2010. Según concluye UP, establecer ayudas específicas para compensar estas desventajas sería una solución para evitar el abandono de estos cultivos.