La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha celebrado este lunes una reunión con el sector ganadero para analizar la situación de afectación de la lengua azul en las Baleares, tras detectar 12 casos confirmados en explotaciones de Mallorca y una en Menorca, sin incidencia en la salud pública.
El director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fernando Fernández, junto a parte del equipo del servicio Sanidad y Bienestar Animal se ha reunido con miembros del sector ganadero de las islas para actualizar los últimos datos y compartir documentos técnicos de trabajo.
El objetivo es «evitar la propagación de la enfermedad por el archipiélago a través de medidas como la desinfectación y desinsectación de las fincas, animales y el transporte”, ha explicado Fernández, ha informado la Conselleria en un comunicado.
Durante la reunión, a la que han asistido tanto de manera presencial como telemática las distintas asociaciones agrarias de las Baleares, cooperativas y agrupaciones de defensas sanitaria ganadera (ADS) con sus veterinarios, se ha explicado que hay 13 focos por el serotipo 8 confirmados en Baleares (12 en explotaciones de Mallorca y 1 en Menorca) -todos en el ganado ovino- y se está a la espera de conocer el resultado de las muestras recogidas en otras fincas.
«Hemos decidido ampliar las medidas restrictivas a Ibiza y Formentera aunque no tengan focos detectados. Lo hacemos como medida de prevención”, ha subrayado el director general.
El Govern ha insistido en transmitir un mensaje de seguridad a la población ya que “esta alerta sanitaria no tiene ninguna incidencia sobre la salud pública”. La lengua azul es una enfermedad vírica que se transmite mediante mosquitos del género Culicoides y que afecta a rumiantes de diferentes especies.
A la espera de iniciar la campaña de vacunación, algo que no será posible hasta finales de año dado que no hay disponibilidad de vacunas, la Conselleria sigue el procedimiento y el protocolo de actuación que marcan tanto la Unión Europa como el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación: todos los focos confirmados se tienen que registrar de manera obligatoria en el Sistema de Alerta Sanitaria Veterinaria (RASVE).
Además, se ha restringido el movimiento del ganado vivo entre explotaciones y no se podrá exportar hacia el exterior a zonas libres del virus sin una prueba de PCR negativa.