La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, organismo dependiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), ha presentado este miércoles 30 ante el Consejo del Agua de la demarcación, órgano en el que participan usuarios, administraciones y diferentes organizaciones del sector, el nuevo Plan de Sequía del Guadalquivir.
El nuevo Plan es la principal herramienta para combatir las situaciones de escasez y da apoyo normativo al organismo de cuenca para realizar las modificaciones y cambios oportunos en la gestión del agua.
La novedad es diferenciar la situación de sequía prolongada, que registra un descenso de precipitaciones, y la escasez coyuntural
En su redacción se ha tenido en cuenta como premisa fundamental el uso de indicadores que permitan la detección temprana de la sequía y su valoración, así como la adopción de medidas proporcionadas para afrontarla. Fruto de este trabajo, el Plan permite optimizar las medidas a poner en marcha para luchar contra la sequía.
El nuevo Plan de Sequía, que toma como referencia la serie de años 1980-2012, presenta además una novedad fundamental, la distinción de la situación de sequía prolongada, que es aquella en la que se registra un descenso de precipitaciones y la escasez coyuntural, en la que se unen la falta de precipitaciones con un descenso en el nivel de reservas que limita el horizonte temporal de atención a la demanda.
Concluido el periodo de consulta pública, que se abrió el pasado 21 de diciembre por un periodo de tres meses, el Jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica, Víctor Cifuentes, ha anunciado que se han recibido y contestado un total de 19 alegaciones, algunas de las cuales se han incorporado al nuevo Plan.
Entre ellas, destacan la constitución de una reserva de 100 Hm3 para frutales que podrían perderse irreversiblemente sin un riego de socorro, cambios en las reglas de explotación de las infraestructuras del abastecimiento a Sevilla y Córdoba, cambios en la reserva para abastecimiento en el Sistema de Regulación General, que pasa de 500 a 400 Hm3 debido al incremento de la capacidad de embalse en 1.166 Hm3 desde 2007 y a la disminución del consumo, el reajuste de la tabla de referencia para los desembalses de este mismo sistema y otras modificaciones de carácter más específico o local, así como corrección de erratas y ajuste a los criterios generales para todas las Confederaciones Hidrográficas dispuestos por la Dirección General del Agua.
El nuevo Plan de Sequía ha sido informado favorablemente por el Consejo del Agua de la Demarcación para su remisión al Gobierno de la Nación, tal y como prevé el Real Decreto 1389/2011, y su posterior presentación al Consejo Nacional del Agua junto con los Planes de Sequía del resto de las cuencas intercomunitarias.