La Comisión Europea seguirá aplicando los aranceles a la importación de vehículos eléctricos desde China, después de que en la votación que celebraron este viernes los países de la Unión Europea no se haya alcanzado una mayoría cualificada en contra de la propuesta. En la votación de hoy, 10 países votaron a favor, 5 en contra y 12 se abstuvieron, confirmaron las fuentes. Como respuesta, China mantendrá inicialmente las investigaciones a la carne de porcino y a los productos lácteos europeos en la que España se juega más de 1.900 millones de euros.
«La propuesta de la Comisión Europea para imponer derechos compensatorios definitivos a la importación de vehículos eléctricos desde China ha obtenido hoy el apoyo necesario de los Estados miembros», dijo la Comisión Europea en un comunicado.
Aunque Bruselas aseguró que «la UE y China continuarán trabajando duro para explorar una solución alternativa que sea completamente compatible con la Organización Mundial del Comercio (OMC)».
Los aranceles, que se están aplicando de forma provisional desde julio, entrarán ahora en vigor de forma definitiva cuando se publiquen en el Diario Oficial de la UE, a más tardar, el 30 de octubre.
Ante el riesgo a entrar en una guerra comercial con China, la división entre los Veintisiete ha ido en aumento en los últimos meses, que se ha evidenciado con una fractura del eje franco-alemán, ya que París votó hoy a favor y Berlín, en contra.
CHINA MANTENDRÁ LA INVESTIGACIÓN A LAS IMPORTACIONES DE CARNE DE CERDO Y PRODUCTOS LÁCTEOS DE LA UE: ESPAÑA SE JUEGA 1.900 MILLONES
Alemania, de hecho, ha endurecido su postura, ya que en una primera votación no vinculante a mediados de julio, decidió abstenerse.
España, por su parte, pidió el jueves a la Comisión Europa seguir negociando con China «hasta el último momento» en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC), según la carta que el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, envío al vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis.
En respuesta a los aranceles, China mantendrá inicialmente, y pese las gestiones del Gobierno español, una investigación a las importaciones de carne de cerdo y productos lácteos de la UE, que para España representan una factura de exportaciones de casi 1.900 millones de euros en el primer caso y de 91 millones en el segundo.
De hecho, ya se habla de que Brasil o Argentina figuran entre las alternativas desde las que China podría elevar sus importaciones de cerdo si finalmente impone aranceles a esa carne procedente de la Unión Europea (UE).
Bruselas decidió en julio aplicar aranceles hasta el 36,3 % al fabricante SAIC, del 19,3 % a Geely y del 17 % a BYD, por considerar que reciben subvenciones que dañan a los fabricantes de la UE.
Unos aranceles que también afectan a las importaciones de los fabricantes occidentales que producen en China, como Telsa, Dacio o BMW que serían gravadas con un 21%.
Bruselas decidió impugnar la semana pasada ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) la investigación china a los productos lácteos.