En su pregunta Aguilera avisa de la “amenaza” que supone este brote para los olivares europeos. “Es preciso que la Comisión entienda la gravedad del problema y tome medidas urgentes antes de que el daño sea irreversible”, ha instado Aguilera. “De no hacerlo, dicha bacteria podría acabar con las plantaciones de olivos de Europa”, ha advertido.
Asimismo, inquiere que “ante la magnitud del riesgo, la solución verdaderamente efectiva pasa necesariamente por el cierre de las fronteras de la UE para el material vegetal que pueda estar infectado”, según propone Aguilera en su pregunta parlamentaria, en la que exige a la UE que haga lo necesario para proteger la sanidad de los olivares europeos y evite la propagación de la bacteria asesina del olivar en la UE.
En respuesta, el Ejecutivo comunitario ha actuado como siempre, sin tomar decisiones y dejando todo en el aire, aunque confirma que no descarta la restricción de importaciones así como de movimientos en el interior de la UE así como la toma de medidas extraordinarias para asegurarse de que se abordan cuidadosamente el riesgo de introducción y propagación de la Xylella fastidiosa en la UE