En principio, los umbrales de referencia comunitarios eran de 1.779 euros/t para el virgen extra; 1.710 para el virgen y 1.524 para el lampante con una acidez libre de 2 grados -este importe se reducirá 36,70 euros/t por cada grado de acidez suplementario-.
Pero estos niveles podrán ser actualizados por la UE en función de la evolución de la producción, los costes en el campo y los mercados.
Los precios actuales están por debajo de los costes de producción
La ayuda por tonelada y día de almacenamiento se fijaría, llegado el caso, mediante reglamento de la Comisión Europea (CE) y se concedería a operadores reconocidos por los Estados.
De momento, los precios actuales de mercado se sitúan por debajo de los costes de producción, según los oleicultores, aunque no llegan a los niveles que en el pasado activaron las retiradas. En algunas categorías, incluso hubo alzas en la última semana.
Infaoliva (almazaras) informó de precios de 1,97 euros/kg para el virgen extra; 1,78 para el virgen y 1,64 para el lampante.
Poolred recoge, por su parte, repuntes en la última semana -a excepción de los lampantes, que caen hasta 1,66 euros/kg-, lo que deja a los vírgenes extra, vírgenes y aceites de calidad inferior en 2,05; 1,86 y 1,35 euros/kg, respectivamente (mientras, en Italia se pagan a 3,21 euros los vírgenes extra y a 2,45, los vírgenes).
Valores muy moderados en el mercado de futuros
En el mercado de futuros se han realizado operaciones en los últimos días entre 1.630 a 1.720 euros/t; valores muy moderados que podrían anticipar próximos descensos en compra-ventas de "contados".
Ante este escenario, ¿se iniciarán los movimientos en el campo para pedir el almacenamiento? y, en su caso, ¿serviría de algo?
"Desde hace tiempo llevamos pidiendo que se ponga en marcha cuando los precios en origen lleguen a 2,40 euros/kg, que son los niveles bajo los cuales no se cubren costes de producción", detallan fuentes de COAG, que critican que no se hayan actualizado nunca los valores que desencadenan esta retirada subvencionada.
"A fecha de hoy, deberíamos estar en situación de tener el almacenamiento privado", según las cotizaciones actuales, añaden.
ASAJA valoró desde el otoño la posibilidad tras conocer el aforo andaluz
Desde ASAJA-Jaén señalan que, ya en otoño del año pasado, solicitaron el almacenamiento privado, tras conocer los primeros aforos de la Junta de Andalucía, que avisaban de un "buen año" en producción, y tenían claro también que el sector entraría en un ejercicio vital para conocer cómo funcionaría el nuevo sistema.
En la nueva normativa en vigor, se mantienen los precios desencadenantes de la medida, pero con una diferencia, "pequeña pero importante", y es que la UE, por primera vez, podría "adecuar" estos precios a la realidad actual de mercado, explican.
Es decir, la Comisión podría activar el mecanismo sin tener en cuenta los antiguos precios desencadenantes, sino otros que considere que perjudican al sector por estar por debajo de los costes de producción, una circunstancia que se da en el sector oleícola jiennense, según fuentes de Asaja y de las almazaras.
UPA apuesta por vender y "no en mecanismos de retirada"
Sin embargo, fuentes de UPA Andalucía opinan que "la estrategia en la que hay que pensar es en la de vender aceite y no en mecanismos de retirada" del aceite de oliva, una medida transitoria que obliga a ponerlo en circulación después, por lo que termina retrasando los problemas pero provoca un derrumbe de los precios finalmente de todas formas.
"No podemos perder ni un momento en distracciones, sino en pensar cómo colocamos en el mercado" una producción creciente de aceite, que este año será superior a 1,7 millones de toneladas en España.
No hay que descartar nunca que deba activarse pero, señalan, hay que poner el énfasis en acelerar las ventas exteriores, porque sólo un 3% de las grasas comestibles que se consumen en el mundo son aceites de oliva, lo que da idea de su potencial inexplorado.
Andalucía terminó una de las mejores cosechas de su historia, mientras que las lluvias de las últimas semanas permitirán que el campo se prepare para una próxima recolección oleícola que también será buena. Almazaras y envasadores tendrán que vender más aceite.