Desde la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) han vuelto a dejar clara su postura sobre el dragado del Guadalquivir: no estaba en contra del dragado, pero sí de un dragado ejecutado sin las debidas garantías sobre su impacto ambiental y afección sobre los usos agrarios. Por eso, ahora está satifechos al ver que «uno a uno, todos los argumentos de nuestra Asociación han ido siendo validados por parte de las administraciones, hasta que por fin la Autoridad Portuaria ha tenido que rendirse a la evidencia de que, en estas condiciones, el dragado no puede ejecutarse y tendrá que esperar».
Desde Feragua se insiste en que «con las debidas medidas ambientales y compensatorias, posiblemente el dragado sea una obra positiva para el futuro de Sevilla, pero ejecutado a las bravas no sólo no iba a serlo, sino que iba a resultar catastrófica. Por tanto, es inútil y demagógico culpar del retraso a las fuerzas inmovilistas de la ciudad, como se ha escuchado estos días atrás, porque si aquí ha habido un responsable ha sido la Autoridad Portuaria de Sevilla que, con una actitud camicace y muy poco medida, acabó metida en una espiral de huidas hacia adelante que nos ha llevado a la situación en la que estamos», segú se recoge en su boletín La Voz del Regadíos Andaluz.
(Foto: Jorge Sierra/WWF)