Ante esta situación consideran las asociaciones que es "inadmisible que un procedimiento que conlleva la ampliación de la zona de seguridad hasta abarcar dos urbanizaciones completas y la expropiación de 102 viviendas, se pretendiera aprobar sin someter a conocimiento público la justificación de una decisión de tal envergadura".
De igual forma señalan que "no nos podemos creer que, como dice el nuevo anuncio, esto se deba a un error. Más bien, estamos convencidos de que, una vez más, la CHE ha pretendido deliberadamente, ocultar información que pueda ser relevante para cuestionar este proyecto".
También recuerdan que ha pasado ya el mes de plazo que marca la ley para entregar documentación en materia ambiental desde que se solicitó formalmente los anejos no expuestos así como otros expedientes relacionados con la obra, sin que hayamos tenido respuesta alguna. "La ocultación de información ha sido una constante en el devenir de este proyecto. Es absolutamente inadmisible que esto siga pasando cuando se han producido circunstancias tan graves como los deslizamientos, que originaron incluso movimientos de la actual presa, que obligaron a declarar el nivel 2 de emergencia, y tras más de 2 años no se ha podido eliminar la alerta de emergencia (ahora está en nivel 1)", lamentan en su nota.
Por ello, "exigimos que se depuren responsabilidades y que de una vez por todas se ponga fin a este bochornoso proyecto que desde que empezó hace 30 años no ha sido sino una continua sucesión de chapuzas y errores".
Por último, también piden a las diferentes formaciones políticas de Navarra y Aragón que, de cara a las próximas elecciones, "ean responsables y hagan uso del sentido común y apuesten por la paralización de este desmadre social, ambiental y económico en el que se ha convertido el recrecimiento de Yesa, cuyo desvío presupuestario supera ya el 400%, llegando a los 425,1 millones de euros".