La XXXIV Reunión de la Asociación Española de Girasol celebrada en Sanlúcar de Barrameda ha apostado por dar visibilidad a la importancia que el girasol tiene como cultivo sostenible en la agricultura.
Más de 40 miembros de la Asociación han participado en las ponencias y actividades que se han organizado en el marco de este encuentro. La jornada matinal del primer día estuvo dedicada a los resultados de redes (OEVV, RAEA y GENVCE) y a las ponencias técnicas “El impacto de la Agricultura del Carbono en la producción de Girasol y Colza”, “Presentación de CARBOLIVA: biocarbon sostenible”, “Estudios genéticos en jopo de girasol” y “Resultados del test-control de mildiu para variedades de girasol”.
También se han presentado interesantes datos globales de la campaña de girasol en las ponencias “Análisis de La campaña de girasol 2024: estimación de superficie y del precio del girasol en 2025” y “Segmentación del mercado del girasol 2024”.
Tras comenzar la sesión de tarde con la ponencia técnica “El uso del aceite de girasol en la industria alimentaria” se han tratado diversas cuestiones internas de la AEG, como la aprobación de cuentas anuales del ejercicio 2023 y su aplicación de resultados, las actuaciones llevadas a cabo por la Asociación en 2024 y la situación en divulgación: página web y redes sociales (informe, colaboraciones y propuestas para 2025). El segundo día se han celebrado las reuniones de los grupos de actividades AEG. La reunión anual de la AEG ha finalizado con una visita cultural al casco histórico de Sanlúcar de Barrameda y un almuerzo.
Tras los dos días de ponencias, diálogo e intercambio de opiniones entre los socios, se ha decidido avanzar en el reto de futuro que esta Asociación Española de Girasol tiene desde su origen y que «no es otro que ser referencia con rigor para el cultivo del girasol. Para ello nos proponemos dar visibilidad a la importancia que el girasol tiene como cultivo sostenible en nuestra agricultura, destacando la importancia que ha adquirido en el norte de España en los últimos años y conseguir situar la superficie de siembra en el sur en el lugar que le corresponde».