EFE.- "Cultivar encuentros con la tierra" (Ed.Mundiprensa), que se presenta hoy en coincidencia con el Día de la Tierra, es una aproximación a la cultura ecológica a través de las tareas y destrezas del tiempo y del agricultor.
Esta obra, que hace el número 98 de Aráujo -que ya ha empezado el 99 y el 100- es "como un viejo árbol", afirma a EFE el periodista, naturalista y agricultor, pues se nutre de otro publicado hace 33 años, "el primero aparecido en España sobre agricultura ecológica".
"Cultivar encuentros con la tierra", afirma, es producto de 38 años de "experiencias consecutivas, muy intensas cultivando yo mismo la tierra. Y fruto también de la vivencia de la Naturaleza".
No es solo un manual sencillo y práctico de agricultura ecológica sino también un calendario de la naturaleza y un manifiesto a favor de los productos orgánicos y en contra de la destrucción de los suelos, la contaminación y los transgénicos, resume a Efeverde.
También pretende servir de estímulo a cultivar, aunque hoy día -añade- "hay mucha gente que quiere un determinado porcentaje de su alimentación controlada, entre otras cosas por la crisis".
Para tener un huerto, el suyo tiene media hectárea de extensión y se encuentra en la Sierra de Guadalupe (Extremadura), no se necesita experiencia previa sino que es "una cuestión de praxis y buena voluntad, pero si tienes pautas adecuadas, mejor".
"Hay mil gotas de sudor por cada letra. Es auténtico", añade Araújo, miembro de la Real Academia de las Letras y las Artes de Extremadura y Premio Global 500 de la ONU, entre otras muchas distinciones.
Su último libro defiende la agricultura ecológica, que puede tener -dice- un alto rendimiento, pero sin contaminar y con la mitad de gasto en energía y agua con respecto a la agricultura tradicional.
"De entrada, solo por eso somos más soportables para el planeta", manifiesta Araújo, que sostiene la existencia de una ofensiva encubierta contra esta práctica de cultivo, y que atribuye esencialmente de la industria agroquímica.
Hoy, la agricultura ecológica representa entre un 1 y 1,5 por ciento de la producción nacional.
Entre sus cultivos preferidos, menciona aquellos que como el ajo y la cebolla casi nunca enferman y tienen un alto rendimiento, o las habas y las judías, que tampoco suelen plantear problemas.
De su enorme producción ecológica, regala mucho, conserva mucho y come mucho, pero el 50 % vuelve a la tierra a través de sus animales (caballos, cabras y gallinas). "Es lo que se llama permacultura, un ciclo cerrado".
Araújo, que planta una media de mil árboles al año, sembrará el próximo otoño el bosque "José Luis Sampedro", fallecido hace unas semanas a los 96 años, el número exacto de árboles que compondrán dicho bosque.
También tiene dedicados este tipo de espacios a Miguel Delibes o a su padre, siempre personas que él ha admirado o querido a lo largo de su vida.
"Cultivar encuentros con la tierra" será presentado hoy en La Casa Encendida por el periodista Joaquín Fernández, ex presidente de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental.