En la última década, como consecuencia de la liberalización del mercado eléctrico, y tras el último tarifazo eléctrico decretado en 2013, los regantes han tenido que hacer frente a una duplicación de la tarifa eléctrica, al que se ha sumado un aumento del consumo energético vinculado a la modernización de las infraestructuras. Todo ello ha llevado a una exposición a los costes eléctricos insoportable, que desde la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) están tratando de aliviar optimizando la gestión energética y la compra por parte de energía por parte de los regantes, aunque también apuestan por un IVA reducido como alternativa para rebajar el coste de la factura eléctrica.
En este sentido, se destaca que esta actitud proactiva para optimizar el consumo y ahorrar costes no debe hacer olvidar sin embargo que parte de la verdadera solución al problema de la factura eléctrica del regadío es política, y pasa por una reducción del IVA. «Sólo un IVA reducido, como el que tienen los regantes italianos, puede aportar una solución sostenible a este problema», señalan desde Feragua.
En el caso de las comunidades regantes, hay que recordar además que el IVA supone un incremento del 21% en la cuenta de resultados de las explotaciones, pues no se puede compensar. Los regantes individuales sí pueden compensar IVA, pero las comunidades no pueden hacerlo, incrementándose así de esa forma la carga fiscal de la factura de la luz.