Por ello, los participantes se han reunido en la calle Doctor Fleming del municipio con todo lo necesario para la fiesta, incluso con un reloj colocado en uno de los balcones que ha dado las doce campanadas llegada la hora.
Para la cita, personas de distintas edades se han congregado en la calle, con la complicidad de los vecinos, que han apoyado la fiesta aunque no participen activamente en ella.
La única condición para participar era llegar al menos 15 minutos antes de la medianoche, con el fin de pelar las gambas y que estuviesen preparadas perfectamente segundos antes de la medianoche.
De momento, la iniciativa es de gente de la localidad relacionada con el mundo del mar, aunque sus promotores no descartan incluso ubicarla en el calendario festivo local como una actividad más de las fiestas navideñas.
La gamba de Isla Cristina es uno de los principales productos pesqueros de la localidad y forma parte de la producción de una lonja que cuenta con más de 200 embarcaciones, la mayoría de tipo artesanal.