EFE.- El conseller de Agricultura y Medio Natural, Josep Maria Pelegrí, y el subdirector general de Silvicultura y Montes del Ministerio de Agricultura, Rafael Gómez del Álamo, han acudido hoy a la población fronteriza de La Jonquera para firmar este convenio, reunirse con los alcaldes de municipios que resultaron afectados por las llamas y visitar los trabajos que ya se realizan en el bosque.
Un aparcamiento de la Jonquera, en la frontera con Francia, fue el origen del incendio por una colilla mal apagada, y hoy Pelegrí y Gómez del Álamo han escogido esta población para escenificar la regeneración del área incendiada y las medidas adoptadas para evitar un nuevo desastre.
Josep Maria Pelegrí ha explicado que los 3,6 millones de euros, de los que la Generalitat ha aportado 900.000 euros por el momento y el Gobierno español 1,8 millones, se emplearán en "obras destinadas a la restauración de las zonas afectadas, prevención de los incendios y a infraestructuras para que no se vuelvan a producir".
Estas labores se reparten a lo largo de más de 140 kilómetros de caminos e incluyen la puesta al día de puntos de abastecimiento de agua.
Pelegrí ha recordado que la comarca del Alt Empordà es, desde el punto de vista de las infraestructuras, masa forestal, espacios protegidos y viento de tramontana, "un espacio de riesgo"
El conseller ha detallado que, además de estos trabajos, hay una previsión por parte de la Generalitat de firmar un convenio "que pretende replantar diez millones de árboles en dos años con la colaboración de la Fundación Española de la Madera".
Otro anuncio de Josep Maria Pelegrí ha sido que el gobierno catalán maneja "un proyecto de ordenación agroforestal que vincula la agricultura a la gestión forestal".
Pelegrí ha cifrado los daños causados por el incendio del pasado verano en 143 millones de euros y ha señalado que "el objetivo es que algo así no se vuelva a repetir".
Las actuaciones consisten actualmente en la tala de madera muerta, podas y tratamiento de restos vegetales, mejora o construcción de pistas, restauración de barrancos y mejora de infraestructuras forestales como puntos de agua o elementos para conducir rebaños.
Los trabajos han sido sometidos a la tramitación de evaluación de impacto ambiental con certificación de que no afectan los valores por lo que la zona está incluida en la Red Natura 2000.