"La agricultura ecológica es el sistema más respetuoso con el medio ambiente, pero hay aspectos que aún se pueden mejorar", ha señalado Torremocha.
En este sentido, se encontraría, por ejemplo, potenciar, en Europa, la producción de piensos ecológicos -hay muy poco para abastecer a la ganadería y hay que importar- a través del fomento del cultivo de forrajes y oleaginosas bio, ya que de esta forma, el gasto energético que supone importar un producto se reduciría.
El objetivo es tener listo el código para finales de 2014, ya que se trata de un objetivo complejo, al abarcar desde la producción hasta que llega al consumidor, para ver dónde se puede incidir para lograr procesos cada vez más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
El grupo de trabajo creado al efecto cuenta con la colaboración de agricultores y ganaderos, comercializadores, empresas de distribución eco, investigadores, consumidores, entre otros, para evaluar todas las partes de la cadena.