EFE.- Este estudio ha sido finalista de la segunda edición del Concurso VALORTEC, una competición organizada por ACC1O, la Agencia Catalana para la Competitividad de la Empresa, a la que se presentaron un centenar de propuestas de toda Cataluña.
La tecnología, desarrollada bajo el liderazgo de les doctores Isabel Villaescusa y Núria Fiol, consiste en un método de reducción de metales pesados -cromo VI, cadmio, níquel y plomo- procedentes de aguas residuales.
Para ello, los investigadores utilizan residuos procedentes de industrias agroalimentarias como restos de café, huesos de aceituna o, incluso, corcho o tallos de vid.
Una de las responsables del proyecto, Isabel Villaescusa, ha explicado que el metal queda absorbido por estos productos orgánicos y, al filtrar el líquido, "el agua queda descontaminada".
En febrero de 2013 se conocerá cuál de los diez proyectos finalistas es escogido para recibir el apoyo de ACC1O para confeccionar un plan de negocio diseñado.