El sector del comercio de cereales y oleaginosas de España ha señalado que la huelga de los estibadores -anunciada a partir del 6 de marzo si no hay un acuerdo previo- «les afecta a la fuerza», porque España es un país «muy deficitario» en estos productos básicos de la alimentación.
Así lo ha asegurado en declaraciones a Efeagro el secretario general de la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe), José Manuel Álvarez, quien aún así ha detallado que los almacenes aún tienen excedentes de cereal nacional para tres meses, por lo que no habría problemas de abastecimiento «siempre y cuando la huelga no se eternice».
Una opción, más cara, sería comprar soja en puertos franceses o portugueses, y transportarla por carretera hasta España
En oleaginosas, la situación es más problemática, según ha apuntado Álvarez, porque España no produce soja y se podría llegar a «un gran problema» si las protestas de los estibadores se prolongan.
En ese caso, la opción sería comprar soja en los puertos franceses o portugueses, y transportarla por carretera hasta España, pero el inconveniente es el encarecimiento del producto, según ha reconocido.
Desde la Confederación de Fabricantes de Alimentos Compuestos Para Animales (Cesfac), su director general, Jorge de Saja, se muestra confiado en que la huelga, de haberla, se produzca en días alternos y con respeto los servicios mínimos.
De ser así, el impacto en abastecimiento de soja sería «poco o ninguno», y si la huelga se agudizase De Saja también apunta la opción de traer producto desde los puertos de los países vecinos.
Actualmente, según ha remarcado, en los puertos y en las instalaciones de los fabricantes de piensos compuestos hay soja almacenada para cuatro días.
Los puertos son el punto de entrada de la práctica totalidad de los cereales y oleaginosas que compra España en el extranjero y las adquisiciones anuales rondan o superan los 4.500 millones de euros en los últimos años.
En 2015, según los datos del Centro de Comercio Internacional (ITC), España importó cereales y oleaginosas por valor de 4.828,3 millones de euros; y en 2014, por 4.478,3 millones de euros, lo que supone más de 13 millones de euros diarios.
Importan cereal de otros países y en España lo pagan barato a los agricultores que no cubren ni los costes