Agentes de la Guardia Civil han intervenido dos plantaciones de marihuana que crecían ocultas en campos de maíz ubicados en el término municipal de Belver de Cinca (Huesca) y sin el conocimiento de sus respectivos propietarios.
Según informa el Instituto Armado, las dos plantaciones fueron decomisadas el viernes pasado por agentes del puesto de Belver de Cinca, con un total de 74 plantas intervenidas que pesaron en la báscula un total de 110 kilos.
Tras comprobar que los dueños de los campos desconocían la existencia de las plantas, los investigadores realizaron diversas pesquisas para tratar de identificar a los autores del cultivo ilegal.
Al no obtener resultado las labores de vigilancia realizadas, los agentes procedieron a decomisar la marihuana y a ponerla a disposición del juzgado de guardia de Fraga.
Desde la Guardia Civil de Belver de Cinca se han instruido diligencias policiales que, junto con las plantas intervenidas, fueron puestas a disposición del Juzgado de Guardia de Fraga, han informado desde la Guardia Civil de Huesca.
tres detenidos por plantar también marihuana en una finca en Caspe
Asimismo, se ha producido una actuación similar, aunque con detenidos, el 18 de agosto en Caspe. La Guardia Civil arrestó a tres personas por poseer 144 plantas de marihuana, 137 de ellas en una finca y las siete restantes en la vivienda de uno de los detenidos.
Según han explicado desde la Guardia Civil, la patrulla perteneciente al Puesto de la Guardia Civilde Caspe realizaba un servicio por el paraje denominado «Rimer de Acá» de la localidad, cuando observaron que en una parcela sin vallar existía un cultivo de marihuana que se encontraba en un avanzado estado de crecimiento.
Del mismo modo, comprobaron que dicha plantación carecía de sistema de riego alguno, lo que hizo sospechar a los agentes que alguna persona, de forma asidua, podría acudir al lugar para su cuidado y mantenimiento, por lo que decidieron establecer una discreta vigilancia sobre la misma.
En diferentes momentos del día, se procedió a la detención del propietario de la finca, L.A.G.L., un varón de 57 años y nacionalidad española, al que se le imputa un delito contra la salud pública por tráfico y otro por cultivo de drogas. Además, a C.A.A.S., hombre de nacionalidad colombiana y J.R.G.C., hombre de nacionalidad española, de 22 y 23 años respectivamente, se les imputa un delito contra la salud pública por cultivo de drogas.
Al parecer, estos últimos cuidaban y mantenían las plantas a cambio de una cantidad de cannabis para su consumo.