EFE.- Tejerina ha participado en Madrid en la inauguración del seminario internacional Ulysses «Food price volatility: looking for viable policy approaches», en el que ha afirmado que «las tensiones existentes» entre la demanda y la oferta de alimentos son «los principales responsables de la volatilidad de los precios».
En ese sentido, ha añadido que no cree que pueda establecerse un vínculo «como en algún caso se ha tratado de realizar», entre los Acuerdos y las negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y las crisis de precios en el sector agrario.
Durante su intervención, ha defendido la alimentación como «un derecho individual y una responsabilidad colectiva» que deben garantizar los Estados y quienes forman parte de ellos.
En su opinión, «no cabe duda» de que la liberalización del comercio contribuye a generar riqueza «para toda la sociedad», pero que «también es cierto» que la agricultura tiene «unas características propias que generan la volatilidad» de los precios, «cuyos efectos, la globalización se encarga de transmitir rápidamente a los mercados internacionales».
Para Tejerina, se trata de mantener un equilibrio entre la eliminación de las barreras comerciales para fomentar el aumento de las transacciones y la continuidad de algunos mecanismos que consideren la singularidad del sector agrario.
Por tanto, ha indicado, las políticas agrarias nacionales y supranacionales deben estar coordinadas y disponer de instrumentos que «corrijan o atenuen» los desequilibrios del mercado.
Según ha remarcado, para España es prioritario mejorar la productividad y rentabilidad de la agricultura mediante una «apuesta clara» por la investigación y la innovación, así como por avanzar en políticas e instrumentos de gestión de riesgos, climáticos, de mercado o financieros.
Por su parte, el representante en el seminario de la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Jean Balie, ha recordado que se trata de un proyecto que tiene como objetivo el análisis y la gestión de la volatilidad de los mercados agrarios y de alimentos para estabilizar el sistema agroalimentario de la Unión Europea y del mundo en desarrollo.
El proyecto comenzó a desarrollarse en agosto de 2012, cuenta con un presupuesto de casi 2 millones de euros y finalizará en julio del próximo año.
Balie ha mostrado el deseo de la FAO de continuar colaborando con los miembros del consorcio del Ulysses en la promoción y coordinación de mejores políticas sobre este asunto.
En su intervención, el director de Análisis Económicos de la Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea, Tassos Haniotis, ha detallado las políticas comunitarias y las cuestiones relativas a la seguridad alimentaria.
Entre las cuestiones que causan preocupación para asegurar el suministro agro-alimentario y las demandas de mercado ha señalado el cambio climático o la productividad.
En la jornada de hoy también se analizarán las causas de la volatilidad de los precios y las medidas para hacerlas frente, y los mercados futuros.