EFE.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recibido hoy a los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, de UGT, Cándido Méndez, de USO, Julio Salazar y a la secretaria general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), Bernadette Ségol, quienes le han pedido que defienda en la Cumbre un cambio de políticas.
La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, que también ha asistido a la reunión, la ha calificado de constructiva y ha asegurado que el Gobierno dará la batalla por el empleo juvenil.
Además, ha subrayado que todavía queda una semana para dialogar con los socios europeos.
En referencia al desempleo juvenil, ha recordado que España recibirá entre 1.500 y 2.000 millones de euros entre 2014 y 2015 de los 6.000 millones que se contemplan en la iniciativa europea.
Falta saber, ha señalado Báñez, cual es la mejor forma para que lleguen esos fondos cuanto antes a los diferentes países.
Los sindicatos, escépticos, han pedido a Rajoy que defienda en Bruselas un cambio de políticas macroeconómicas para que no aumenten la pobreza y la desigualdad y para ello han pedido una "renta mínima garantizada" en todos los países de la Unión Europea.
Toxo, que ha acudido al encuentro en calidad de presidente de la CES, cree que la Cumbre quedará "en mínimos" y no va a solucionar cuestiones prioritarias para los trabajadores y ciudadanos de la UE.
A su juicio, la Cumbre va a defraudar las espectativas creadas sobre los objetivos de avanzar hacia la unión bancaria, el desarrollo de un programa de financiación a las pymes y un programa para luchar contra el empleo juvenil.
La razón, según ha dicho, es que las elecciones alemanas pesan "como una losa" en el desarrollo de esa reunión en la que no cree que vaya a tener cabida la dimensión social europea, que era uno de los compromisos adquiridos en la anterior cumbre de diciembre.
También Méndez ha compartido el temor a que la Cumbre no tenga "ningún tipo de contenido" y ha avisado de que en el proyecto de resolución, que "anticipa" los resultados, no figura el problema del desempleo juvenil.
El líder de UGT que, al igual que Salazar, también ha asistido al encuentro como miembro de la CES, ha advertido de que incluso en el caso de que se incluya este asunto en la Cumbre si sólo se plantea un anticipo del 4 % o del 5 % de los 6.000 millones presupuestados para esta cuestión no se dará solución al problema.
Además, ha avisado de que "si esto sigue así" la población no percibirá una Europa como esperanza sino como amenaza y esto se puede trasladar a las elecciones del Parlamento europeo.
Por su parte, Salazar ha insistido en que si no se aborda la dimensión social la Cumbre quedará en "pura calderilla" y ha recordado que el desempleo juvenil es parte del problema fundamental europeo, que es "el paro en su conjunto".
En su opinión, si las políticas para combatir el paro juvenil se fundamentan sólo en dar subvenciones a las empresas "se quedará en puro verso", porque lo que se necesita para crear puestos de trabajo es un relanzamiento económico.
Los sindicatos también quieren que se potencie el diálogo social en Europa pero no considerado como un mero intercambio de puntos de vista, ha explicado Ségol, sino como posibilidad de modificar las políticas adoptadas por los diferentes países.
Ségol ha señalado que ya ha avisado a Rajoy sobre el peligro político de "no hacer nada" porque se suceden las cumbres sin resultados y que se está produciendo una incertidumbre y un descrédito de la UE que representa un "peligro" para la democracia.