La Comisión Europea ha considerado que este hallazgo no afecta por el momento a la seguridad alimentaria en la Unión Europea, según afirmó un portavoz comunitario de Sanidad, Frédéric Vincent.
Fuentes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente han insistido en que, desde el punto de vista sanitario, "no existe un riesgo adicional por la presencia de carne de caballo" y en que "los controles sobre su producción y su comercialización, como del resto de las carnes, es competencia de la Aesan y de las Comunidades Autónomas".
En "España se produce carne de caballo existiendo explotaciones y establecimientos que se dedican específicamente a este fin" y si bien el consumo nacional es limitado, "la producción se comercializa en su mayor parte en el exterior; no es, por tanto, sorprendente que pueda aparecer carne de caballo española en otro país", han añadido.
Por su parte, el secretario general de la Asociación Profesional de Salas de Despiece y Empresas Cárnicas (Aprosa-Anec), Manuel González, ha calificado la polémica de "ridícula" hasta que no se complete la investigación y ha subrayado que "en todo caso se trataría de un fraude económico" a los consumidores.
"Desde el punto de vista sanitario no hay ningún problema, pero posiblemente la carne de caballo es más barata que la de vacuno y ahí sí hay un engaño al consumidor", ha afirmado.
González ha insistido en la importancia de aclarar con precisión de dónde proviene la carne hallada en las hamburguesas para evitar una polémica mayor y que se pongan "en tela de juicio" los controles sanitarios españoles. "En ese caso, según ha afirmado, tomaríamos alguna medida".