En vísperas del Día Internacional de las Lucha Campesina, que se celebra el 17 de abril, la Coordinadora Europea Vía Campesina (ECVC) ha enviado una carta abierta a diversas personalidades institucionales de la UE para exigir un marco político sólido que permita alcanzar la soberanía alimentaria a nivel europeo y mundial y estar mejor preparados en caso de crisis alimentaria.
En el contexto de la guerra en Ucrania y de otros conflictos armados mundiales, ECVC expresa en la carta su solidaridad con los campesinos que, a pesar de todo, siguen trabajando para producir alimentos para las poblaciones de su región.
Para ECVC, las fragilidades que existen en las cadenas de suministro de alimentos y energía han quedado al descubierto por los acontecimientos mundiales de los últimos dos años. Estas fragilidades reflejan los intereses de un puñado de organizaciones poderosas y, sin embargo, ponen en peligro el acceso a alimentos frescos, sanos y suficientes para las sociedades de todo el mundo. Por ello, ECVC exige que el control de los sistemas alimentarios y de producción vuelva a estar en manos de la población, en forma de soberanía alimentaria.
Hay que valorar mejor el papel y la importancia de los y las campesinxs y garantizarles el acceso a la tierra, las semillas, los recursos y el mercado a través de la política de la UE. Entre las medidas concretas identificadas para conseguirlo, ECVC destacó la garantía de unos ingresos justos para los campesinos y los trabajadores agrícolas a través de medidas de regulación del mercado y de la aplicación de la directiva de la UE sobre prácticas comerciales desleales a nivel nacional, como ha ocurrido recientemente en España.
«LA UE DEBE EVALUAR CÓMO LOS MECANISMOS DE ESPECULACIÓN Y LAS RESERVAS PRIVADAS DE ALIMENTOS INFLUYEN EN LA VOLATILIDAD Y FLUCTUACIÓN DE LOS PRECIOS”
Según Andoni García Arriola, miembro español del Comité Coordinador de Vía Campesina, necesitamos un cambio de paradigma en la política agrícola y comercial de la UE para abordar realmente este problema. «La alimentación es un derecho humano básico y no puede ser tratada como una mercancía. Debemos replantearnos todo el enfoque de los sistemas de producción de alimentos y empezar a comerciar de forma que se proteja el sustento de los productores de alimentos, lo que significa no imponer a los agricultores una competencia desleal entre sí. Tenemos que eliminar la agricultura de los Acuerdos de Libre Comercio (TLC) y debemos estar de acuerdo en que la OMC no es el espacio adecuado para debatir las cuestiones alimentarias y agrícolas».
Del mismo modo, según Morgan Ody, miembro del Comité Coordinador de ECVC de Bretaña (Francia), el modelo orientado a la exportación que han creado las políticas neoliberales ha provocado subidas de precios injustificadas para los ciudadanos, a pesar de los tiempos de guerra.
«La UE debe evaluar también cómo los mecanismos de especulación y las reservas privadas de alimentos influyen en la volatilidad y fluctuación de los precios. La creación de reservas públicas estratégicas de alimentos a nivel nacional en cada Estado miembro de la UE, con el apoyo de un mecanismo de coordinación de la UE, sería mucho más eficaz para garantizar la seguridad alimentaria en toda Europa. »
Para Coordinadora Europea Vía Campesina, ante la prueba evidente de los enormes fallos del sistema actual que quedan aún más expuestos por la guerra en Ucrania y por la pandemia de coronavirus, es hora de actuar. Los responsables políticos deben garantizar la aplicación de una visión sistémica de la soberanía alimentaria y los aliados y ciudadanos de la Unión Europea deben exigir la responsabilidad y el cambio a través de las políticas públicas, para el futuro de nuestros sistemas alimentarios. Se trata de una cuestión de derechos humanos, de derechos de los agricultores y de derechos de los ciudadanos que no puede seguir siendo ignorada.