Se concreta en casi 25,5 millones de euros en obra forestal, la mayoría para trabajos de prevención de incendios y para la gestión sostenible de los montes públicos, y casi 20 millones para diferentes paquetes de ayudas, entre los que ha destacado la conservación de terrenos adehesados, cuya convocatoria, dotada con 15 millones, se ha aprobado este mes.
Con este gasto se realizarán en los dos próximos años, según ha indicado el director general, repoblaciones forestales, tratamientos selvícolas, pistas forestales, mejoras para el ganado, nuevas infraestructuras y trabajos para la lucha contra incendios.
Fuentes ha destacado el "empeño" del Gobierno extremeño en adoptar todas las medidas para intentar evitar que la masa forestal se queme y ha recalcado que la inversión en obras de prevención de incendios asciende este año a 14 millones de euros, un 125% más que el año anterior.
Este dinero se destina a infraestructuras como pistas forestales, cortafuegos, puntos de abastecimiento de agua, podas y clareos, restauración de terrenos quemados y repoblación forestal, actuaciones con las que, ha insistido, se crearán en torno a 50.000 jornadas de trabajo.
Además, el director general ha explicado que Extremadura tiene una superficie forestal de 2.831.650 hectáreas (casi el 68% del total del territorio), de las que el 34% corresponden a dehesa (1.430.000 hectáreas), el 13% a pastizal (casi 558.000 hectáreas), cerca del 12% son bosques (512.000) y algo más del 6% es superficie de matorral (432.000).
Además, hay distribuidas casi 180.500 hectáreas de montes de utilidad pública, mientras que otras 70.000 están en manos privadas.
En este sentido, Fuentes ha indicado que los montes públicos "deben actualizarse para mejorar este patrimonio natural, generar puestos de trabajo, prevenir incendios y obtener un aprovechamiento económico para la madera, biomasa, apicultura o caza".