EFE.- Ambos, junto al consejero de Agricultura, Jose Antonio Echávarri, han presentado, en rueda de prensa, el Grupo de Trabajo que participará en la Ponencia del Tabaco del Comité de las Regiones.
El Jefe del Ejecutivo regional ha indicado que defenderá "con uñas y dientes" un sector muy importante para la comunidad, que está muy implicado en el desarrollo de la misma y que, ha dicho, es fundamental que siga teniendo un papel muy importante en el futuro de la comunidad autónoma, donde cuenta con 20.000 empleos.
Ha señalado que para él es "un honor y una gran responsabilidad" ser el ponente del dictamen y representante del país en el Comité de las Regiones cuando se trata de un tema de "tanto calado" para Extremadura, España y Europa.
En esta línea, ha destacado la relevancia del Comité de las Regiones que, pese a no tener carácter vinculante, se ha convertido no hace mucho en "un órgano de consulta obligada" en el seno de la UE y cuyas decisiones tienen consideración "preceptiva" antes de la toma de decisión de la Comisión Europea.
De ahí, la importancia de este dictamen de cara a la propuesta de modificación de la directiva comunitaria, aprobada en diciembre del pasado año, sobre fabricación, conservación y venta tanto del tabaco como de los productos relacionados con él.
A partir de ahora, se abre un período de elaboración del dictamen que arranca mañana con la reunión de Mérida, a la que seguirá la próxima semana un encuentro en Bruselas con representantes europeos.
El 30 de abril se debatirá el dictamen ante la Comisión de Recursos Naturales y se someterá a votación los días 3 y 4 de julio en el plenario del Comité de las Regiones.
Monago estará acompañado por Ricardo Miranda, natural de Navalmoral de la Mata, ingeniero agrónomo y, desde 2007, director de la Organizacion Interprofesional del Tabaco de España (OITAB).
El dictamen, según Miranda, consta de dos partes: las recomendaciones políticas y las recomendaciones de enmiendas a la propuesta de la directiva comunitaria, la cual está acompañada además de un informe que evalúa el impacto que las medidas contempladas pueden llegar a tener sobre los ciudadanos europeos.
El objetivo es "aunar y buscar una posición común" acerca de los aspectos a regular: protección de la salud, contribución del sector del tabaco al desarrollo rural, la estandarización de los productos y sabores -con la salvedad de los precios-, o su peso e importancia dentro de las exportaciones.
Igualmente, aborda cuestiones como la fiscalidad, pues el sector del tabaco genera 100.000 millones de euros en la UE, 10.000 millones en España, donde supone el 51% de los ingresos de impuestos especiales indirectos y el 6% del total de los ingresos de lo que recauda el Estado español, ha precisado.
También se referirá al contrabando, que representa en torno al 10% de las ventas en la UE y España, aunque este porcentaje se incrementa hasta el 20% en regiones como Galicia o Andalucía, la libertad de empresas y de consumidores, o la subsidiariedad por la que se incluyen 16 acciones delegadas con las que se podría invadir la competencia de los Estado miembro; no en vano, según Miranda, esto ha sido rechazado por ocho países.