“La Agroganadera de Trujillo es una cita de gran calado y una feria clave para la economía extremeña”, dijo el presidente extremeño, quien consideró que lo más significativo, por encima de la excelencia de las razas, es la actitud con la que participan los ganaderos en este encuentro anual.
José Antonio Monago explicó que el Gobierno de Extremadura se encuentra trabajando para que la ganadería de la región sea un referente internacional y expresó su convencimiento de que, por primera vez en los últimos años, “hay un poco de luz en el sector del porcino”.
En este sentido dijo que la norma de calidad del ibérico contribuirá a la recuperación de un sector que se encuentra a la cabeza del país en el censo de reproductoras y que se recupera poco a poco de la importante crisis que ha sufrido en los últimos años.
El presidente de la Institución Ferial de Trujillo, Alberto Casero, aseguró que la Feria Agroganadera de Trujillo es un referente del oeste español que ha logrado mantenerse a pesar de la crisis económica y precisó que el certamen coincide con los primeros signos de recuperación económica de España.
Casero expresó su satisfacción por el hecho de que la Agroganadera haya registrado en la presente edición una mayor afluencia de ganado equino debido a que no coincidirá con la celebración del Salón Internacional del Caballo de Pura Raza Española (Sicab) de Sevilla.