En ese sentido, Carlos Brando, consultor de la P&A Marketing advirtió que con la crisis mundial "la tendencia es que haya una disminución de los ‘blends’ (miscelánea de granos) regionales", que según él serán sustituidos por combinaciones locales.
"Las monocápsulas y el consumo de café soluble, impulsado por los precios bajos y la gran aceptación entre los jóvenes, son los grandes atractivos del mercado y eso lleva al café robusto para niveles inéditos", agregó.
En ese escenario, Brasil, con casi tres cuartos de su producción del tipo arábigo, debe "revitalizar el consumo en los mercados tradicionales, que ahora abren espacio para otros consumidores", advirtió Brando.
El experto puso como ejemplos que una red de tiendas en India recibe medio millón de clientes por día y esa "nueva dinámica" del consumo se vive en países como China, Corea del Sur, India, Vietnam e Indonesia, grandes productores de café robusto.
En China el consumo crece anualmente el 15% y entre 2003 y 2013 las exportaciones aumentaron en un 500%, citó Brando.
Para Judith Ganes-Chase, fundadora y presidenta de J. Ganes Consulting, indicó que "a mediano plazo ese escenario no debe cambiar" y el consumo de café robusto "crecerá con un ritmo fuerte en los próximos tres, cinco años y nunca fue tan alta".
Entre enero y abril de este año, el 86,8% del café exportado por Brasil fue de la variedad arábiga, el 10,6 % correspondió al grano soluble, el 2,5% al robusto y el 0,1% restante al tipo tostado y molido.
El Quinto Foro Coffee & Dinner, promovido por el Consejo de Exportadores de Café (CeCafé) de Brasil, debatió varios aspectos de la producción y la exportación del grano bajo el tema "Cómo las actuales tendencias del consumo irán a afectar el abastecimiento futuro".