La organización agraria ARAG-ASAJA ha reclamado a Agroseguro que ponga fin a determinadas prácticas que pueden comprometer la viabilidad de las explotaciones de cereal afectadas por la sequía.
La organización ha mostrado su preocupación en la reunión mantenida esta mismo martes con responsables de la Consejería de Agricultura, por algunas prácticas en la peritación llevadas a cabo hace unas semanas en una zona concreta de La Rioja Alta. Prácticas que tienen que ver con la reducción de las producciones por una supuesta afección de enfermedades de cultivo y que, en realidad, son consecuencia de la escasez en el desarrollo del cereal debido a la ausencia de precipitaciones.
ARAG-ASAJA es plenamente consciente de que los seguros agrarios deben adaptarse a la actual situación climatológica para ser rentables pero esta condición no puede ser asumida casi en exclusiva por los agricultores quienes llevan años suscribiendo seguros sin la seguridad de que estarán respaldados si sus explotaciones se ven afectadas por los fenómenos meteorológicos adversos.
Fenómenos como el estrés hídrico al que han sido sometidas muchas explotaciones de cereal en varias zonas de La Rioja.
Es por ello que ARAG-ASAJA ha insistido en su petición de que tanto la Consejería de Agricultura así como el Ministerio actúen con la mayor celeridad posible en la implementación de medidas para compensar la pérdida de rendimientos por la sequía y que Agroseguro ponga fin a las prácticas que no aseguran la rentabilidad de las explotaciones..
ARAG-ASAJA recuerda que el cultivo del cereal es clave para la región y que los cerealistas riojanos acumulan hasta tres años de malas cosechas y pérdida de rentabilidad debido no solo a la sequía sino a la inestabilidad internacional y los efectos de la guerra de Ucrania.