La presidenta de ARA, Rosario Andújar Torrejón, ha reclamado acciones concretas para frenar la despoblación del mundo rural y ha criticado que las grandes compañías “den la espalda al medio rural” a la hora de invertir en servicios públicos. La responsable de los Grupos de Desarrollo Rural ha puesto como ejemplo las grandes operadoras de fibra óptica. “Están invirtiendo donde les resulta más rentable a corto plazo olvidando las zonas rurales alejadas de las grandes ciudades” ha lamentado Andújar para quien este tipo de servicios es fundamental para fijar la población al territorio.
Tras conocer los datos del informe sobre “Población y despoblación en España 2016” de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), la presidenta de ARA ha explicado que la pérdida de población de las zonas rurales, menos acentuada en Andalucía que en el resto de España, se debe a múltiples factores entre los que ha mencionado la baja tasa de natalidad y la escasez de servicios públicos vinculados con las comunicaciones, educación, sanidad, etcétera.
Pese a olvidarse de él, creen que la ciudad necesita de un medio rural vivo y lleno de oportunidades
A continuación ha opinado que “vivir en el medio rural se está convirtiendo en un privilegio para sólo aquellos que se lo pueden permitir por su calidad de vida, patrimonio cultural, medio ambiente, etcétera”.
Con todos estos datos, la responsable andaluza ha exigido acciones concretas que frenen el abandono del medio rural y ha destacado la importancia de las iniciativas de desarrollo rural- gestionadas por los Grupos de Desarrollo- como medio para diversificar la economía de las zonas rurales y generar riqueza y empleo. “Ha habido momentos en que se ha priorizado la economía de escala y esto se ha traducido en menos oportunidad para la juventud que han emigrado a las grandes ciudades en busca de trabajo”.
Entre los factores que han frenado el abandono del medio rural andaluz, Andújar Torrejón ha destacado la importancia de los conocidos como Planes de Empleo Rural al invertir en infraestructuras y servicios públicos permitiendo que todos puedan trabajar y vivir dignamente en sus pueblos.
Por último, se ha referido a que la ciudad necesita de un medio rural vivo y lleno de oportunidades pues es “el soporte de unos bienes y servicios ambientales cada vez más demandados por la sociedad, y el depositario de la mayor parte de nuestro patrimonio cultural y artístico”.
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