Tanto Euskadi como Cataluña han aumentado el dinero que recibirán en estos años -la única que su opuso abiertamente al pacto alcanzado fue Andalucía-, pero se han quejado de que hay una tendencia hacia la centralización y la toma de decisiones desde el Estado en materia agrícola.
"El Estado -ha dicho Pelegrí- se está extralimitando en sus competencias, debería ser más neutral, porque la PAC aprobada por Bruselas nos permite tener una política propia y el Estado no lo hace posible".
Otros ejemplos de "recentralización" que han puesto son la intención de crear registros únicos en Madrid de los agricultores activos o de las licencias de caza.
Además de criticar la "recentralización", los dos consejeros han acordado que Euskadi y Cataluña trabajen conjuntamente en tres ámbitos agrícolas: los ciclos cortos de comercialización, la salida a los mercados internacionales y la agricultura ecológica.
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