Las emisiones causadas por la deforestación y la degradación de bosques, sobre todo en zonas tropicales, son del orden del 20 % de las emisiones antropogénicas globales del planeta.
En este sentido, el Secretario de Estado ha mostrado el compromiso de España con el sector forestal en los países en desarrollo, ya que se trata de “una herramienta fundamental para la lucha contra el cambio climático”.
Ha subrayado su objetivo de trabajar desde la Presidencia del Partenariado para que se mantenga como “una plataforma real de comunicación y diálogo y de intercambio de experiencias, sobre la que gire la información de acciones y financiación que los socios deseen compartir y, en definitiva, una verdadera plataforma de promoción de cooperación entre todos los socios”.
Entre las acciones que se impulsarán, Ramos se ha referido a la promoción de la cooperación entre socios, la valoración de las necesidades reales de los países en vías de desarrollo, la priorización de financiación de algunas lagunas identificadas en los análisis realizados hasta ahora y la mejora de la coordinación de instituciones multilaterales y bilaterales.
El Secretario de Estado ha resaltado que el programa de trabajo se va a construir sobre la base de lo realizado, lo que ayudará a que sea en el futuro “ambicioso, a la par que realista y que aporte continuidad a las actividades que ya se están llevando a cabo”.
“España se compromete a acometer todos los esfuerzos necesarios para lograr el máximo progreso posible en el próximo semestre y asegurar el éxito del Partenariado integrando en la construcción del mismo a todos los interesados”, ha concluido Ramos.
El Partenariado se lanzó en la Cumbre de Copenhague de diciembre de 2009, donde seis países (Estados Unidos, Australia, Reino Unido, Japón, Francia y Noruega) comunicaron su compromiso de movilizar 3.500 millones de dólares para iniciativas de REDD+. El siguiente paso fue una reunión de alto nivel en París (marzo de 2010), en la que más de 50 países se comprometieron a su establecimiento.
En mayo de 2010, en Oslo, los Jefes de Estado y Ministros de más de 50 países, entre ellos España, se adhirieron al documento que establece el Partenariado.