España registrará este año un aumento en la producción de vino del 17,6%, seguida de Italia con un 7%, lo que convierte a ambos países en los dos únicos grandes productores de la Unión Europea donde se esperan «signos positivos» en esta cosecha, según un informe publicado este jueves por el Comité de Organizaciones Agrarias y Cooperativas comunitarias (Copa-Cogeca).
Italia superará no obstante a España en volúmenes de producción, con 41 millones de hectolitros estimados para 2024, mientras que España se situará en la segunda posición, con unos 38,1 millones de hectolitros.
El «considerable» incremento de la producción en España se produce pese a las «difíciles condiciones climatológicas» y en particular la sequía, precisa el mismo documento. Y se produce en un momento en el que la pasada vendimia se ha caracterizado por los bajos precios de la uva y el enfado de los productores con las bodegas.
El cambio climático «está adelantando el inicio de la cosecha» en España y algunas zonas la comenzaron ya en la segunda quincena de julio.
Por áreas, el aumento de la producción vinícola en el país «se debe principalmente al buen comportamiento de los viñedos de la región de Castilla-La Mancha, que representa más de la mitad de la producción nacional de vino» y que ha incrementado su producción en un 23% en comparación con el año pasado.
Otras regiones como Cataluña, Comunidad Valenciana, Aragón y la región de Murcia seguirán la tendencia del año pasado o ligeramente por debajo debido a la grave escasez de agua, precisa el informe.
En toda la UE se estima que la producción en 2024 alcanzará los 144 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que representa una ligera disminución (casi el 3 %) con respecto al año anterior y un 10 % por debajo de la media de cinco años.
La caída, según Copa-Cogeca, «refleja los desafíos actuales a los que se enfrenta el sector, en particular en términos de condiciones climáticas adversas».
Francia, que fue el primer productor en 2023, ha caído este año al tercer puesto al perder un 22% en la producción, para situarse en un total 37,4 millones de hectolitros. También producirán menos vino que el pasado año Alemania y Portugal, con disminuciones del 8,7 y 7,9% respectivamente.
La misma organización indicó que los datos revelan que la UE continúa con la tendencia a la baja desde la cosecha de 2019.