El secretario general de Agricultura y Alimentación del Ministerio de Agricultura, Fernando Miranda, ha asegurado que hasta 2022 ó 2023 no será efectiva la nueva PAC, ha subrayado que durante este tiempo no se van a interrumpir los pagos a los agricultores y ganaderos, aunque ha advertido que en este tiempo «España y las comunidades autónomas tendrán que realizar un importante trabajo para adaptarse a las novedades que se produzcan».
En este sentido, ha considerado que España tiene «tiempo para adaptarse a estos cambios», a pesar de lo cual el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha comenzado a convocar a partir del 21 de enero a las comunidades autónomas para abordar este asunto.
Miranda ha indicado que será necesario la cooperación de todos «para que España sea capaz de presentar su plan estratégico, entre los primeros países de Europa» que le ayude a adaptarse cuanto antes a los cambios que se avecinan.
Lucha para conseguir que la PAC sea la que pague los efectos del Brexit
Miranda, que ha participado en un encuentro con agricultores de la organización profesional Asaja en Ciudad Real, ha asegurado en declaraciones a los medios de comunicación que «España hará un dura defensa» del presupuesto para que no sea la Política Agraria Común (PAC) la que «tenga que pagar» los efectos del Brexit, para lo que «liderará la defensa del presupuesto actual».
«Hay espacio suficiente para que la PAC mantenga su presupuesto» y para que, de esta forma, «los agricultores y ganaderos sigan desempeñando un papel importante como conservadores del medio ambiente y del clima».
Por otra parte, ha hecho un repaso de la situación actual del sector agrario en España y ha recordado que está en un momento «pujante» como lo demuestra «que somos la octava potencia a nivel mundial, con una balanza exportadora de 50.000 millones de euros».
Además, ha reseñado que recientemente se ha publicado el dato de la renta agraria que ha subido un 3,4 por ciento en el último año y sitúa al agricultor ocupado con una renta aproximada a los 35.000 euros.
Una situación que puede mejor en el futuro, «pues se avecina un crecimiento de la población mundial, que hará que crezca la demanda de alimentos en el mundo, lo que puede ser una oportunidad para el sector», ha dicho el secretario general del Ministerio.