Ante el alarmante declive de las abejas y otros polinizadores, el Gobierno ha lanzado un Plan de Acción Nacional para revertir la delicada situación a la que se enfrentan estos insectos, asediados por el uso de fitosanitarios, una de sus principales amenazas.
Es una situación «muy preocupante», han señalado fuentes de Biodiversidad y Calidad Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) consultadas por EFE, quienes señalan que con este plan de acción se persigue favorecer su conservación y la de sus hábitats para propiciar la recuperación de estos insectos.
Solo en España existen más de 7.000 especies de dípteros, 4.000 de lepidópteros, 9.500 de himenópteros- el grupo de las abejas- y más de 10.000 coleópteros que desempeñan un papel primordial en la polinización.
El objetivo del Ministerio para la Transición Ecológica se centra en evitar y reducir el uso de fitosanitarios
El borrador -en información pública (5 marzo-5 abril)- recogerá las líneas y prioridades de la Iniciativa de la Unión Europea (UE) sobre insectos polinizadores, y para su redacción final se tendrán en cuenta «todas y cada una de las aportaciones recibidas» hasta finalizar el plazo de presentación de alegaciones.
Para revertir el daño causado por el inadecuado empleo de insecticidas, herbicidas y fertilizantes, que causan la muerte de manera directa o indirecta de polinizadores silvestres o domésticos, se prevén actuaciones específicas, de manera coordinada con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, para evitar y reducir el uso de fitosanitarios.
Además del uso de productos tóxicos, entre los factores más relevantes que causan la mortandad de estos insectos sobresalen la pérdida y degradación de hábitats (incluyendo la generada por la intensificación agrícola y otros cambios de uso del suelo), los agentes patógenos y enfermedades, las especies exóticas invasoras y el cambio climático.
Por eso acciones como promover hábitats favorables, prácticas sostenibles agrícolas, creación de entornos adecuados urbanos, mejorar la gestión de los polinizadores y reducir los riesgos derivados de plagas, patógenos y especies exóticas invasoras son algunas de las propuestas incluidas para su recuperación.
Según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), el 16,5 % de los polinizadores vertebrados están en peligro de extinción a nivel mundial, mientras que en Europa, el 9 % de las especies de abejas y mariposas están amenazadas y las poblaciones disminuyen en un 37 % en el caso de las abejas y un 31 % en el de las mariposas.
El Programa de Vigilancia del Ministerio de Agricultura sobre las colonias de abejas melíferas (Apis mellifera) refleja que la mortalidad invernal en el periodo 2016-17 ha sido del 9,8 %, mientras que la mortalidad primaveral en esta campaña se estima en un 2,3%.
Éstos datos sólo reflejan la situación de las poblaciones de la abeja melífera -una especie doméstica- pero pueden «aportar pistas sobre la situación de las poblaciones polinizadoras silvestres».