El Informador.- "Las presas que son adecuadamente planificadas, construidas y operadas pueden contribuir a la seguridad alimentaria y energética, pero desafortunadamente los intereses a corto plazo son a menudo el foco en la toma de decisiones", manifestó en un comunicado el especialista en Seguridad de Agua del WWF, Jian-hua Meng.
Por este motivo, el Fondo Mundial para la Naturaleza ha elaborado un informe, "Los Siete Pecados de la Construcción de Presas", en el que desvela las malas prácticas en este tipo de construcciones.
Algunos de los pecados recogidos por el documento son la construcción de las presas en un río equivocado, despreciar la biodiversidad, no obtener una licencia para operar o no manejar de forma correcta los riesgos e impactos.
El WWF también denunció aquellas construcciones que no valoran alternativas mejores, más baratas y que dañan menos el medio ambiente.
"Para garantizar niveles aceptables de sostenibilidad social y medioambiental, este tipo de instalaciones deberían seguir de forma estricta los criterios formulados bajo la Comisión Mundial de Presas o el Protocolo de Evaluación de Sostenibilidad de Energía Hidroeléctrica. En caso de que los incumplan, el proyecto debería ser modificado o abortado", expresó Meng.
Además, el WWF reprobó la falta de capacidad o de independencia de algunos gobiernos para proteger el interés público.
"Los proyectos a gran escala deberían obtener una licencia social para operar. La aceptación de estos planes por parte de la población es fundamental para la gestión sostenible", añadió el experto.
En este sentido, afirmó que en muchos casos no se tienen en cuenta los efectos negativos que pueden tener este tipo de construcciones para la población como la reubicación de personas, la destrucción de sitios culturales, de la pesca local o la desaparición de humedales.
Por otro lado, el texto menciona una serie de construcciones o proyectos que la organización considera no sostenibles, como las polémicas presas de Belo Monte (Brasil) y Xayaburi (Laos), o los proyectos europeos de Austria y Turquía.
El documento se detiene especialmente en el caso de Austria, donde se está planteando en la actualidad la extensión de la planta hidroeléctrica Kaunertal.
Esta ampliación tendría graves consecuencias ecológicas para tres valles alpinos de Oetztal, según el Fondo Mundial para la Naturaleza.
"WWF analizó nueve presas y descubrió que muchas de ellas no sólo desatendían uno, sino muchos de los graves pecados en su construcción. Sin embargo, estos errores podrían evitarse. La falta de capacidad, las presiones económicas o circunstancias regionales específicas no deberían ser nunca más una excusa", sentenció Meng.