EFE.- En Cantabria hay alerta naranja (riesgo importante) por nevadas con una acumulación de 20 centímetros en Cantabria del Ebro y Liébana, y también por fenómenos costeros con áreas de mar muy gruesa y mar de fondo del noroeste con olas de hasta 5 metros.
En Andalucía hay alerta amarilla (riesgo) por viento en Almería, Granada y Málaga y por nevadas en la sierra de Grazalema (Cádiz), en tanto que las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara en Castilla-La Mancha mantienen aviso amarillo por vientos.
Aragón tiene aviso naranja por nieve en el Pirineo oscense y en las Cinco Villas (zaragoza), y alerta también naranja por fuertes vientos con rachas máximas de 100 km/h en el área de Güdar y el Maestrazgo.
La provincia de Burgos (Castilla y León) está en alerta naranja por nieve en puntos de la cordillera cantábrica con una acumulación de 20 centímetros, y alerta amarilla en León y Palencia por nieve, así como Cataluña por nevadas, aludes y viento con rachas de 90 km/h en el prelitoral de Tarragona.
La Comunidad Foral de Navarra tiene aviso naranja por nevadas en el Pirineo, vertiente cantábrica y la zona centro; en Galicia hay alerta naranja por fenómenos costeros en el litoral, con áreas de mar muy gruesa, mar de fondo del noroeste y olas de hasta 5 metros.
La Rioja está en alerta por nevadas en la ribera del Ebro y la ibérica riojana.
Asturias sigue en alerta por nieve en la Cordillera, Picos de Europa, suroccidental asturiana y en los valles mineros, y por fenómenos costeros con mar de fondo del noroeste y olas de hasta 5 metros.
El País vasco está en aviso naranja por nieve con una acumulación de 15 centímetros en la cuenca del Nervión, Vizcaya y Guipúzcoa y también por fenómenos costeros en el litoral con áreas de mar muy gruesa al principio y mar de fondo del noroeste con olas de 5 metros.
Madrid, Melilla, Lanzarote (Islas Canarias), Islas Baleares, Comunidad Valenciana y Murcia mantienen alerta amarilla por viento.
La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante, fenómenos meteorológicos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.